Tras más de 2000 millas navegadas repartidas en diez singladuras, el patrullero “Atalaya” regresó a su puerto base en Ferrol a las nueve de la mañana de este jueves, día 30, de donde había zarpado el pasado día 20. Durante su navegación, el buque español realizó, entre otras actividades, presencia en aguas de jurisdicción nacional, Reserva Marina de Alborán y en peñones del Norte de África. Así como, protección del patrimonio arqueológico sumergido y control de la pesca en aguas españolas.
Además, el patrullero “Atalaya” actuó en apoyo asociado a la operación “Sea Guardian” de la OTAN, consistente en el control y protección de las líneas marítimas de comunicación más importantes de la zona para evitar tráficos y actividades ilícitas, todo ello en coordinación con el Centro de Operaciones y Vigilancia Marítima, COVAM. Durante el periodo fueron comprobados los datos de más 150 buques mercantes y 60 pesqueros.
A pesar de las dificultades implícitas debido a la crisis del COVID-19, la Armada continúa trabajando de manera constante para garantizar la seguridad y protección de los espacios marítimos de interés nacional dentro de la acción del Estado en la mar, ya sea en operaciones en el exterior o, como en el caso del “Atalaya” patrullando aguas nacionales.
Acerca del patrullero de altura “Atalaya”
El patrullero de altura “Atalaya” es una de las unidades principales de vigilancia de la Fuerza de Acción Marítima de la Armada. Sus principales misiones en la actualidad comprenden, entre otras, la vigilancia marítima de las costas españolas y de su Zona Económica Exclusiva, la protección de líneas de tráfico marítimo y de infraestructuras críticas y la contribución a las actividades contra el terrorismo y tráficos ilícitos por vía marítima.
Además de las misiones habituales encomendadas a este tipo de buques como son la vigilancia y seguridad marítima de los espacios de soberanía nacional, el “Atalaya”, durante el segundo semestre del pasado año, realizó el Despliegue Africano en las costas del Golfo de Guinea y África Occidental durante cuatro meses.
El “Atalaya”, al mando del capitán de corbeta Valentín Calvar Cerecedo, es el cuarto de su serie y tiene su base en el Arsenal Militar de Ferrol