(Gráficas de Galicia Ártabra)-«Las calles ..abarrotadas, como nunca» así se oía decir a muchos ferrolanos al contemplar el auténtico abarrote registrado en la jornada de este Viernes Santo.
Numerosos ferrolanos y forasteros pudieron asistir, gracias al buen tiempo reinante, a las distintas procesiones en la jornada de la muerte y crucifixión de Cristo. Muy especialmente
EL ENCUENTRO
Uno de los actos tradicionalmente más multitudinario de la Semana Santa Ferrolana es este desfile que organiza la Cofradía de Dolores y que alcanza su punto más álgido en la representación del encuentro de Jesús con San Juan, su Madre y la Verónica, La procesión salió a las 11.30 horas desde la calle Méndez Núñez y tras recorrer varias calles del barrio de la Magdalena, ya de vuelta tuvo lugar en la plaza de Amboage la representación del Encuentro.
Como es tradicional las cuatro imágenes se encontraron y sus portadores las “bailaron”, en un momento muy espectacular que el público, que abarrotaba todos los laterales de la plaza acompañó con aplausos.
Las imágenes que participaron en esta procesión fueron las de Jesús Nazareno, obra de Francisco Guerra Felipe y del año 1863; el San Juan, la Verónica y la Virgen de Dolores, estas tres últimas del siglo XVIII y sin autor conocido. El Viernes Santo es el único día que la cofradía saca a la calle a su Virgen de Dolores y, como novedad, este año estrenó una nueva sayay salió con un trono renovado.
La imagen de San Juan, por su parte, salió de nuevo con su túnica blanca, que estrenó el Domingo de Ramos, bordada en oro y donada por un devoto anónimo. Su trono, también de estreno en el arranque de la Semana Santa, lleva cuatro nuevas figuras que adornan sus hornacinas, representando a Santiago el Mayor, San Martín de Tours, el apóstol San Felipe y San Francisco de Asís.
El acompañamiento musical en esta procesión estuvo a cargo de la la Agrupación del Cristo de la Buena Muerte, la Agrupación Virgen de la Amargura, la Xove Banda de Narón y la Banda Ferrol de la Cofradía de Dolores.
PROCESIÓN DEL CRUCIFICADO
La Cofradía de la Merced organizó a las 16.30 horas este desfile de homenaje al Crucificado, con el único paso de su Cristo Redentor, que este año protagonizó el Vía Crucis de la Junta General de Cofradías y Hermandades. Es una obra de José Rivas, de la escuela de imaginería compostelana, y data de 1927.
Es una de las procesiones más modernas de la Semana Santa Ferrolana, ya que sale desde el año 2007 y recorrió desde la capilla de la Merced las calles María, Arce, Real, Sánchez Barcáiztegui, Magdalena, Coruña, Real, Méndez Núñez y María hasta la retirada de nuevo en la capilla del Tirso. El paso fue acompañado por los cofrades y o por los timbaleros de la Cofradía y la Banda de Acotaga.
PROCESIÓN DEL TRASLADO
A las 18.00 horas la Cofradía de Dolores trasladó los pasos de San Juan Evangelista y la Virgen de Dolores desde su “corralón” hasta la iglesia concatedral de San Julián, desde donde participarán después en el desfile del Santo Entierro y también en el de “Os Caladiños”.
El corto recorrido del traslado fue por Real y Sánchez Barcáiztegui hasta la calle de la Iglesia, sin música.
PROCESIÓN DEL SANTO ENTIERRO
Una vez finalizados los Santos Oficios de la Pasión y Muerte del Señor, presididos por el obispo de la diócesis, Luís Ángel de las Heras acompañado por el párroco y canónigo diocesano Ramón Otero, se organizó por la cofradía titular la procesión oficial del Santo Entierro en la que figuraron los pasos de San Juan y la Virgen de los Dolores y la Santa Urna, obra de Urbano Anido del año 1891, a la que daban escolta como lo hacen tradicionalmente miembros de la Guardia Civil. Un miembro de la Cofradía titular portaba un Cristo obra de Manuel Corgo del año 1891.
En el desfile procesional además de los miembros de la Cofradía figuraban un grupo de señoras y de cadetes de la Escuela naval Militar de Marín.
En la procesión figuraban en la presidencia la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; el Vicepresidente de la Xunta de Galicia, conselleiro de presidencia, Alfonso Rueda Valenzuela: el Almirante Jefe del Arsenal , Antonio Duelo Menor; el Vicepresidente del Parlamento de Galicia, Diego Calvo Pouso; ; el parlamentario gallego y ex conselleiro de Política Social, José Manuel Rey Varela , así como las concejales del Partido Popular Martina Aneiros Barros y Susana Martínez Galdos; el presidente de la Junta General de Cofradías, César Carreño; el Hermano Mayor de la Fundación del Santo Hospital de Caridad, Alberto Lens; el Hermano Mayor de la Cofradía del Santo Entierro, Antonio Loureiro Arias;el delegado de la Xunta de galicia en A Coruña, Ovidio Rodeiro y otras distintas autoridades y representaciones civiles y militares.
Presidía la parte eclesiástica el vicario general de la diócesis, Antonio Rodríguez Basanta acompañado por el párroco y canónigo diocesano Ramón Otero,.
La urna del Santo Entierro fue precedido del San Juan Evangelista y cerrará el desfile el de la Dolorosa de la Cofradía de Dolores. El recorrido de la procesión fue por la calle de la Iglesia, Sánchez Barcáiztegui, Magdalena, Rubalcava, Real, San Diego, Magdalena, Sánchez Barcáiztegui, de nuevo Iglesia y retirada en la concatedral en donde se rezaron las Vísperas con adoración a la Santa Cruz.
La Banda Ferrolá de Música y la Unidad de Música del Tercio del Norte de Infantería de Marina acompañaron el desfile penitencial.
PROCESIÓN DE LA SOLEDAD
A las 21.45 horas, con bastante retraso para no encontrarse con la procesión del Santo Entierro salió de la capilla de la Venerable Orden Tercera. Es un desfile especialmente emblemático para esta hermandad, que este año adaptó la estructura del antiguo trono, aligerándolo para facilitar la tarea de los portadores. También, como novedad, la Virgen de la Soledad llevó un nuevo palio con tela negra, representativa del luto por la muerte de Jesús, y el trono portaba velas en lugar de los antiguos faroles.
Participó en el desfile la imagen de Santa María Magdalena, de Guillermo Feal Otero, del año 1956, además de la de la Santísima Virgen de la Soledad, que es de autor anónimo y del siglo XVIII, el trono de la Virgen por primera vez fue portado a hombros.
La imagen de la Virgen es de gran belleza mostrando la expresión más triste, una mezcla de pudor enigmático con un ritmo cadencioso y tranquilidad.El dolor de la madre ante la pérdida de su hijo amado. Dicen que el autor se basó en la cara de su joven hija fallecida.
La túnica es una auténtica obra de arte tanto en su riqueza como por la maestría en la disposición de su ornamentación.
La procesión se dirigió desde la glorieta Alfredo Martín por la calle Real hasta San Diego, desde la que enfiló por la Magdalena y regresó por Tierra y Real.
La parte musical estuvo a cargo de la Agrupación Musical Virxe do Carme, la Agrupación Musical Cristo de la Buena Muerte y la Banda Ferrolá de Música.