(MANU AMOR) – Según la RAE, un rey es aquella persona que, por su excelencia, sobresale entre los demás de su clase. Pablo Rey y Álvaro Rey, además de su apellido, comparten la capacidad de ser diferenciales. De cambiar el rumbo de un partido. Incluso de aquellos que empiezan mal, errando un penalti en el inicio y despertando viejos fantasmas. Nada importó. Entre ambos tumbaron la fortaleza del Sanse y permitieron al Racing sumar una victoria importantísima, la quinta consecutiva -que se dice pronto- en A Malata.
El equipo ferrolano impuso su ritmo desde el arranque. Se notó quién tenía el agua al cuello y, tras varias aproximaciones peligrosas, la primera ocasión clara llegó en el minuto siete: un zaguero arrastró a Joselu en el interior del área y el colegiado no dudó en señalar el punto de penalti. El delantero asumió la responsabilidad, pero Diego Barrios atajó su débil lanzamiento. Álvaro Rey se encargó de que el fallo no pesase.
Tras una jugada de Maceira por la banda izquierda, el futbolista sevillano recibió la pelota en el pico del área. Dribló a su par, ajustó el disparo y celebró el gol. El ciclo de un extremo. Su diana dio tranquilidad a los pupilos de Ricardo López, cómodos sobre el verde con un Abel Suárez imperial en la sala de máquinas. En el minuto 28, el propio Álvaro Rey anotó el tanto de la presumible tranquilidad: Pablo Rey protagonizó una jugada espectacular, cedió la pelota a su compañero y este solo tuvo que empujarla al fondo de la red.
Una jugada aislada metió al conjunto madrileño en el partido. Una mano de Víctor Vázquez significó una nueva pena máxima, en esta ocasión favorable al Sanse. Rubén Ramos no falló desde los once metros y dio vida al encuentro, pero el cuadro verde supo finiquitar el asunto en la segunda mitad.
La sentencia llegó por medio de Pablo Rey, con la inestimable colaboración del meta rival. Un lanzamiento envenenado del capitán botó justo antes de que Diego Barrios pudiese atraparlo y subió el 3-1 al marcador. Álvaro Rey, cerca del final, anotó la cuarta diana tras una sucesión de rechaces en el interior del área. Su celebración, repleta de sonrisas, fue el fiel reflejo de una tarde feliz para el racinguismo.
Ficha técnica:
Racing: Mackay; Seoane, Víctor Vázquez, Arregi, Maceira; Joseba, Abel Suárez; Armental (Aitor Pascual, min. 74), Pablo Rey, Álvaro Rey (Gonzalo, min. 86); y Joselu (Aarón, min. 82).
Sanse: Diego Barrios; Saúl, Miguel Muñoz, Borja Gómez, Bogdan; Zazo, Toni Arranz; Rubén Ramos, Borja Díaz (Carlitos, min. 46), Fer Ruiz; y Mendi.
Árbitro: Cid Camacho (Castilla y León).
Goles: 1-0 Álvaro Rey (min. 13). 2-0 Álvaro Rey (min. 28). 2-1 Rubén Ramos, de penalti (min. 36). 3-1 Pablo Rey (min. 58). 4-1 Álvaro Rey (min. 79).
Incidencias: A Malata. 1.800 espectadores