La Diputación de A Coruña acaba de encargar la redacción del proyecto técnico para la construcción de una pasarela peatonal en el puente de Santa Icía, en Narón.
El Boletín Oficial de la Provincia publica este viernes el anuncio de licitación, por importe de 12.100 euros, para la elaboración de este proyecto, que tiene por objeto a creación de una pasarela sobre la línea ferroriviaria del FEVE que posibilite la circulación de peones, ya que el actual viaducto no dispone de aceras con un ancho mínimo suficiente que garantice unas adecuadas condiciones de accesibilidad en una zona totalmente urbana, en la que la vía del tren constituye una barrera salvada por la carretera provincial DP 5403.
Los trabajos incluirán el diseño y cáculo de la pasarela, de entre 15 y 20 metros, que facilite el paso de viandantes en la zona. La estructura deberá adaptarse a la normativa vigente en materia de accesibilidad e incluirá la ordenación de la sección de la ponte actual, mejorando sus características de seguridad tanto para la circulación rodada cómo peatonal.
La licitación de este proyecto supone el primer paso en el cumplimiento del compromiso expresado por el presidente de la institución provincial, Valentín González Formoso, durante su visita al municipio de “solucionar el problema de seguridad existente en este punto de la red provincial de la forma más ágil posible”, para lo cual solicitó la colaboración del ayuntamiento en la realización de los trámites administrativos, ya que a la complejidad técnica del proyecto se suma también la complejidad administrativa, “porque para realizar las obras precisamos permisos del gestor ferroviario, ya que el puente entra en su ámbito de afición”, explicó Formoso.
Pasos peatonales en la Solana, Souto Vizoso y La Gándara
Por otra parte, la Diputación de A Coruña invertirá 43.799 euros en la creación y acondicionamiento de nuevos pasos peatonales en la avenida de la Solana, avenida Souto Vizoso y La Gándara, en Narón.
Las obras consistirán en la instalación de sobreanchos y rebaje de las aceras al nivel de la calzada, con el objeto de mejorar la accesibilidad; así como en la instalación de pasos de cebra sobreelevados en determinadas zonas en las que las beirarúas o la calzada son más estrechas.
También se incluye la señalización de plazas de estacionamiento reservadas para personas con movilidad reducida, así como las adaptaciones de acceso a las aceras desde las mismas.
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