Fruto de la colaboración de las unidades de investigación de Guardia Civil (EDOA) y Policía Nacional (UDYCO) se ha podido desarticular la mayor red de abastecimiento, principalmente de hachís, de Ferrol y área de influencia.
La investigación se inició en marzo del año en curso por el EDOA de la Guardia Civil a raíz de sospechas sobre un individuo que pudiera estar distribuyendo hachís en grado medio, dándole el nombre de Operación Escipión. En las primeras vigilancias ya se pudo confirmar indicios de actividades delictivas, por lo que se acudió al Juzgado de Instrucción nº 3 de Ferrol, quien abrió diligencias previas y las declaró secretas.
Una vez que se obtuvo autorización judicial para observar las comunicaciones, se abrió la red delictiva, detectándose un mayor número de personas implicadas. Entre los componentes de la red, se encontraba una persona con un perfil de actividad superior, conocido por los investigadores y objeto de anteriores investigaciones.
Debido a coincidir objetivos con la Operación Bucle del UDYCO del Cuerpo Nacional de Policía, se coordinaron esfuerzos y se decidió seguir la investigación conjuntamente.
En el caso de esta operación en concreto, el trabajo de investigación se vió dificultado por las medidas de seguridad que adoptaban los posteriormente detenidos, entre las que destacaba el escaso uso de teléfono móvil, actividades para la detección de vigilancias y la utilización de numerosos vehículos a nombre de terceras personas. Cabe destacar el hecho de que a uno de los objetivos se le llegó a observar con 8 vehículos diferentes.
La estructura central
La estructura central residía en un clan familiar perfectamente organizado para la distribución de estupefacientes, padre, hijo y novia de éste que recibían de manera mensual alrededor de 50 kilos de hachís.
Una vez reunidas todas las pruebas suficientes para acreditar los delitos investigados, en la mañana de este martes se procedieron a realizar las entradas y registros en 7 domicilios en Ferrol, Arteixo y Sada, practicando 8 detenciones, no descartándose que se produzcan más porque la operación no está cerrada.
Concretamente el padre, M.A.R., residía en una vivienda de madera en el lugar de Rajón, en Covas y la pareja, él M.A.R. y ella J.P.C. en el barrio de Caranza en un piso en la calle Padre Feijóo. Un cuarto detenido tenía su vivienda en la zona del Inferniño, todos ellos en Ferrol.
Por otro lado también se incautaron 1,9 kilos de cocaína, 2,8 kilos de sustancias de corte, 118 kilos de hachís, 9 vehículos de alta gama y una moto de agua y 81.000€ en efectivo. En uno de los coches, valorado en más de 70.000€, se pudo encontrar un habitáculo oculto de muy difícil detección otros 70.000€ a mayores.
También se pudo hallar una pistola de calibre 635 con cargadores del 22, oculta en el interior de una farola dentro de la propiedad de uno de los investigados. Este arma será sometida a pruebas balísticas para determinar si ha participado en hechos delictivos violentos.