Hollande, Merkel y Renzi creen que sus tres países deben ser las palancas para impulsar la Unión Europa tras el Brexit. Como símbolo de su convencimiento sobre el futuro federal para la Unión, estos tres líderes rendían, el pasado agosto, homenaje a Altiero Spinelli ante su tumba.
Altiero Spinelli fue un político italiano antifascista encarcelado en la cárcel de la isla de Ventotene. Fue un gran defensor del federalismo europeo como única solución ante el totalitarismo y el nacionalismo del siglo XX. Posteriormente, sería miembro del Parlamento Europeo durante diez años. Durante su reclusión escribió, junto a Ernesto Rossi y Eugenio Colorni, el conocido como el «Manifiesto de Ventotene».
Este texto pone de relieve la obsolescencia de la soberanía absoluta de los Estados-nación ante el nuevo concepto de «interdependencia económica». Ante esta nueva situación, queda inaplicable el principio de no injerencia, porque la comunidad internacional ya no puede ser indiferente respecto de la vida interna de los Estados.
El programa que propone este Manifiesto se ha materializado en parte con la Unión Europea quedando pendientes algunos de los aspectos que, por otro lado, son de actualidad en el debate político europeo.
Así, se propone una «Europa libre y unidad» a través de la constitución de un «sólido estado federal»; «la abolición de una Europa dividida en estados nacionales soberanos»; la incorporación al proyecto de unidad de una Alemania derrotada; el establecimiento de «una fuerza armada europea” y el fin de las autarquías económicas.
Como podemos ver, algunos aspectos que estos tres pensadores proponían a mediados del siglo XX ya se han alcanzado. La Comunidad Europea del Carbón y del Acero, en primer lugar, se basó en la reconciliación franco-alemanda, la puesta en común de la soberanía y la fusión de los mercados nacionales.
Además, el Programa de Ventotene también proponía la creación de una «unidad monetaria» (el euro), una «Política exterior única» (en la actualidad solamente “común”), la abolición de las «barreras aduaneras» (el mercado interior para el acervo comunitario), las limitaciones a la emigración (en la terminología actual, la libre circulación de trabajadores) y «la representación directa de los ciudadanos» en la toma de decisiones en el nivel federal (es decir, la existencia del Parlamento Europeo).
Los autores consideraron que, sin lugar a dudas, la federación europea sería el primer paso para alcanzar la unión política mundial, la verdadera garantía de la paz internacional y del progreso de la humanidad.
En su edición en español (publicada por la Editorial Ediciones La Lluvia) mis compañeros de UEF España, Pablo Faura Enríquez y Domènec Ruiz Devesa, evalúan su importancia en la actualidad y concluyen: «La Unión de los Federalistas y Europeístas (UEF) y su rama juvenil, los Jóvenes Europeístas y Federalistas (JEF) seguiremos poniendo todo nuestro empeño para que el programa pendiente de Ventotene, tanto en lo que es explícito como en los quedó implícito, no necesite otros tres cuartos de siglo para hacerse realidad. Y lo haremos porque sabemos que, aunque supone una gran obra que requerirá un ingente y perseverante trabajo, se trata de un objetivo que merece la pena. A esa tarea común y necesaria llamamos a todos los ciudadanos, para que cada uno de nosotros ponga su pequeña piedra en la construcción de la Europa unida. Porque, como concluye el Manifiesto de Ventotene “La vía a recorrer no es fácil ni segura, pero debe ser recorrida; ¡y lo será!”». Y lo será paso a paso.
Un comentario
Pingback: El Manifiesto de Ventotene – Altiero Spinelli [artículo] – europeaconvencida