El Bueno, el Feo y el Malo

EL BUENO

Bien saben los que me conocen que soy un completo escéptico de la política, teniendo una perspectiva nada ideológica o partidista, que sí muy demócrata y respetuosa. Un pluralista, así me considero. Es por ello desde El Bueno, el Feo y el Malo jamás se me ha pasado por la cabeza encumbrar a nadie de esas esferas, que sí vilipendiar las acciones propagandísticas de los movimientos políticos y de sus dirigentes. En este caso va a ser distinto.

Es interesante comprobar los diferentes tipos de que tienen algunos partidos y personalidades de hacer oposición en nuestra región ártabra. Ya mencioné domingos atrás, gracias a la Constitución que me protege al manifestar una opinión política no-dolosa, cómo las políticas emprendidas en Ferrol por el BNG, o hasta las del PSOE capitaneado por Beatriz Sestayo, me parecían pobres, sin fundamento, gratuitas y dirigidas al populacho menos crítico para arañar algunos votos. Política de pandereta, vamos, al igual que lo hacen a nivel estatal con el mensaje del miedo hacia los partidos en auge: «tildemos a estos opositores -o al gobierno- que son malos, que son peste, que nos llevarán a la ruina… no, no tienen un definido programa electoral, no es ciertamente demostrable… pero no importa, sigamos tocando la pandereta, a ver si la gente se lo llega a creer… ¡no vaya a ser que los voten!».

Al respecto, debo mostrarme encantado con el último movimiento de Miguel de Santiago, candidato a la alcaldía de Narón por el Partido Popular. Si bien siempre me ha parecido tediosa la conversación entre candidatos a un Gobierno municipal, provincial, autonómico o al que se le ocurra al avezado lector, lo cierto es que he pasado grandes ratos con el juego de ajedrez que durante tanto tiempo han mantenido el actual alcalde de Narón por TEGA, José Manuel Blanco, y su opositor popular, Miguel de Santiago. Y es que no solo han discutido difamándose por los medios de comunicación habituales de prensa o radio, diciendo que uno es burro y el otro buey, sino que hasta por Facebook, como adelantó el pasado enero Galicia Ártabra en este enlace, hemos podido ver directamente a estos dos pesos pesados de la política naronesa reprocharse con comentarios, propinas y un cruce de opiniones que bajo mi punto de vista han enriquecido soberanamente la esencia democrática en Narón.

Con las elecciones de mayo ya sintiéndose en el cogote, el Gobierno de Blanco aseguró a finales de febrero que bajarían el IBI, como se muestra en este enlace. Grata sorpresa cuando ante tal jugada arriesgada, ese intento de jaque a la oposición popular, Miguel de Santiago salió al paso con unas recientes declaraciones, retando al regidor naronés a que «si sigue insistiendo en la mentira y dice que el IBI va a bajar, que haga una cosa: que se comprometa personalmente a los recibos de aquellos vecinos a los que les suba».

Y sí, en este caso el Bueno es el señor de Santiago, y no porque sea yo popular o le tenga especial simpatía, sino porque ha dejado en un jaque incomodísimo al candidato a la alcaldía en Narón en este maravilloso juego de «tira y afloja» que se cuece desde hace meses.

Y es que como bien dijera al inicio de este escrito, nada es más sano que la pluralidad, y nada más entretenido que el arte de hacer política (de calidad, por favor) gracias a los medios de comunicación y a las redes sociales que lo permiten y difunden.

Mucha suerte en Narón y gracias por enriquecer tanto a la democracia en Ferrolterra… ¡y que duren los ya habituales vaivenes!

EL FEO

Lejos de querer sacar la vara política de medir, UPyD es un partido en la oposición que no ha acabado de eclosionar como su cofundadora y portavoz en el Congreso, Rosa Díez, hubiera querido. No obstante a ello, a nivel comarcal, han sabido recoger la descabellada idea para algunos muchos- de fusionar los términos municipales de Ferrol y Narón en uno solo.

Reducción de políticos, ganamos económicamente los ciudadanos, menos trabas administrativas, las arcas municipales serían más opulentas…. Todo pinta fantásticamente bien, como el vídeo que colgaran a primeros de este año 2015. No obstante a ello, y sin ser yo ni defensor ni detractor de tal sugerente proyecto, me pregunto por qué no ha sido así. ¿Acaso los políticos de TEGA, BNG, PP, PSOE y demás son tan vampiros, gatos y forrados –como así se muestran en el vídeo– que no les interesa esta fusión tan prometedora?

En unas recientes declaraciones en Galicia Ártabra del candidato a la alcaldía para Ferrol, José Luis Méndez, llegó a mencionar hasta ocho veces la palabra «fusión», siendo este término casi como un estandarte para hacer desfilar sus líneas maestras de un programa que lleva como ingrediente especial «nosotros no hemos sido corruptos».

Es interesante cómo la ciudadanía de la comarca, y añadiría que de todo el territorio nacional, o bien se posiciona en seguir sosteniendo los bastiones popular y socialista -incluso nacionalista-, o por el contrario los emergentes de Podemos o Ciutadans. ¿Qué sucede con UPyD que, aunque tenga ideas tan destacables como la ya mencionada «fusión», la gente no acaba de depositarles su voto de confianza?

Sin lugar a dudas, algo más tendrá que hacer el señor José L. Méndez, así como su homólogo en Narón, Hugo Rodríguez, para poder tener una presencia mínimamente destacable en sus municipios para llevar a cabo sus proyectos.

Espero ansioso leer su programa electoral.

EL MALO

Ya lo decía el fundador del Estado alemán moderno, ministro y político Otto von Bismarck, en tanto que España «lleva siglos queriendo destruirse a sí misma y todavía no lo ha conseguido», alegando con ello que somos el país más fuerte del mundo. En el caso de Ferrol, y más concretamente de la izquierda política, esta sentencia del burócrata alemán viene como anillo al dedo.

En una reciente publicación de Galicia Ártabra sobre los dimes y diretes los partidos minoritarios de Ferrol, se dio buena muestra de cómo hasta el inspirador y revitalizante grupo Podemos Ferrol, encabezado por Carlos del Río, hacía por romper con el movimiento Marea Ártabra, que solicitaba su adhesión al mismo, alegando un rotundo y soberano «nanai de la china, si eso formamos una gran candidatura de Unidad Popular, pues nosotros tenemos más fuerza que vosotros». De tal formase ha predispuesto con Anova, Esquerda Unida y Espazo Ecosocialista, inicialmente metidos en el proyecto Marea Ártabra.

Carlos del Río cargó también contra el PP y el PSOE, a los que prácticamente los estigmatizó como «CASTA», así como a los nacionalistas del BNG, considerándolos un partido «ciego y sordomudo». ¿Y qué decir de la puntilla final «no es bueno el autismo en la política»? Decepcionante y que no invita para nada al consenso, al progreso, ni a una Unidad Popular que pueda hacer frente al homogéneo Partido Popular. Que para más inri para la gente de izquierdas, sigue sin cagarla.

Desconozco los datos estadísticos de si el PP sacaría hoy día mayoría absoluta o no en Ferrol, pero lo que sí sé es que si el PSOE de Beatriz Sestayo tuviera que formar gobierno con esta izquierda tan fragmentada y conflictiva, saldría la cosa más rana que cuando permitieron echar a perder la Plaza de España y las arcas municipales.