Sobre las doce de la mañana de este sábado, día 28, los bomberos ferrolanos recibieron un aviso para que se trasladarán hasta la calle Real de Ferrol, a la altura del número 164, ya que se habían desprendido de la fachada varios azulejos y habían dañado a dos vehículos aparcados.
Fue necesario el uso de la grúa municipal para retirar los vehículos dañados y así poder instalar en medio de la calle el camión-escalera para retirar otras piezas que también amenazaban caer a la calle.
La labor se desarrolló hasta pasada la una y media de la tarde y durante el tiempo de la “operación” efectivos de la Policía Local cortaron el tráfico de vehículos en el tramo comprendido entre las calles San Diego y Arce.