En una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa, Rajoy ha anunciado que ha convocado para mañana martes un Consejo de Ministros extraordinario para «poner en marcha las disposiciones constitucionales». Al tratarse de una abdicación, será necesario aprobar una ley orgánica, pero Rajoy ha confiado en que «en un plazo muy breve» las Cortes puedan proclamar Rey al Príncipe de Asturias.
Según ha dicho, el Rey está convencido de que «este es el mejor momento para que pueda producirse con toda normalidad el cambio en la Jefatura del Estado y la transmisión de la Corona».
Rajoy ha confiado en que «esta nueva página» de la historia de España se escribirá «en un clima sereno, con tranquilidad y con agradecimiento» a la figura del Rey, al que ha querido rendir homenaje como «el mejor símbolo de la convivencia en paz y libertad» de los españoles y el «principal impulsor de la democracia».
CONFIANZA EN EL PRÍNCIPE
Y además, ha expresado su «más firme confianza» en el Príncipe de Asturias, destacando «su preparación, su carácter, y la amplia experiencia en los asuntos públicos que ha ido adquiriendo a lo largo de estos últimos 20 años». Para Rajoy, todo ello es «una sólida garantía de que su desempeño como jefe de Estado estará a la altura de las expectativas más exigentes».
Por todo ello, ha expresado su convicción de que el proceso se va a «desarrollar con plena normalidad, en un contexto de estabilidad institucional» y «como una expresión más de la madurez» de la democracia española.
Don Juan Carlos tomó la decisión el pasado mes de enero cuando cumplió 76 años y a partir de ahí empezó un proceso de maduración. Primero lo habló con el Príncipe Don Felipe y después con el Gobierno y el líder de la oposición y con los distintos jefes de la Casa Real.