El pasado 1 de abril ocurrió una explosión en una planta de gas natural licuado en las proximidades de la ciudad de Plymouth, estado de Washington. La planta tiene una capacidad de 56.000 m3, es decir, un tercio de la capacidad de Reganosa. Por motivos de seguridad marcaron un perímetro con radio de 2 millas (3,2 Km) y, a pesar del amplio margen de seguridad, solo necesitaron evacuar a 500 personas.
La planta de gas natural licuado Reganosa en Ferrol, cuya actividad declaró ilegal el Tribunal Supremo el día 11 de mayo de 2012, ratificando así la sentencia del Tribunal Superior de Galicia del 22 de abril de 2008. Sin embargo, ya va para dos años y continúa trabajando de manera ilegal, pues no cumple dos normas básicas para instalaciones peligrosas:
1º.- Según el reglamento de actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas (RAMINP) en vigor en el momento de la puesta en marcha; la distancia a zonas habitadas no puede ser inferior a 2.000 metros, pero la planta de gas está situada a 400 metros del núcleo de Mehá, a 900 metros del casco urbano de Mugardos y a 1.600 metros del casco urbano de Ferrol, almacenando en sus depósitos 150.000 m3 de gas natural licuado equivalente a 12 millones de bombonas de uso doméstico.
2º.- La UNE-EN 1532 requiere que los buques cargados con gas natural licuado puedan, en caso de emergencia, salir a mar abierto en el tiempo más breve posible y sin ayuda ajena: esto es imposible por el canal de entrada a la Ría, de 4,5 Km de largo, pues necesitan ayuda tanto para entrar como para salir, y además, solo se puede hacer con pleamar.
La actividad portuaria permite la entrada ilegal de los buques gaseros cargados con 60.000 Tn de G.N.L. y el resto de las autoridades también lo toleran, empezando por la Xunta de Galicia, que participa con un 17,5 % en Reganosa. Tampoco podemos esperar nada del PSOE y BNG, pues cuando gobernaron en coalición, ante este tema mantuvieron la política que había iniciado Fraga.
Solo nos queda que el tribunal de Estrasburgo actúe cuanto antes y haga cumplir la sentencia del Tribunal Supremo, pues un accidente dentro de la Ría con un buque cargado y atrapado, pues no puede salir al momento, causaría una tragedia.
Si tomamos como referencia el perímetro de Plymouth, un radio de 3,2 kilómetros, habría que evacuar en toda la comarca ferrolana a más de 30.000 personas.
Andrés Sanjurjo Martínez