El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha transmitido a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, el interés de las empresas españolas por participar en la construcción de la línea ferroviaria de Alta Velocidad (AVE) que este país prevé construir entre Sao Paulo y Río de Janeiro. Además, ha confirmado que las oportunidades para Navantia y Petrobras también han estado presentes en la reunión bilateral que han mantenido en el Palacio de la Moncloa.
«Hemos hablado del tren alta velocidad de Río de Janeiro a Sao Paulo, de Petrobras, de la construcción de buques, de las necesidades que tiene Brasil de hacer determinadas contrataciones y de las infraestructuras que se van a poner en marcha. Tenemos magníficos astilleros y hemos hablado efectivamente de cosas que podría hacer Navantia«, ha manifestado el jefe del Ejecutivo en una rueda de prensa conjunta con la jefa de Estado de Brasil.
De hecho, en la declaración conjunta que ha distribuido Moncloa tras la entrevista de ambos mandatarios, se precisa que Rajoy y Rousseff «reconocieron el interés en la colaboración entre astilleros españoles y operadores brasileños para incrementar asociaciones, fomentar el apoyo y la transferencia de tecnología, en la construcción y reparación de buques para suministro a las plataformas de exploración petrolífera«.
Petición de Feijóo
Las oportunidades de los astilleros gallegos en Brasil es un tema que preocupa al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que envió un informe a Rajoy para que buscara con Rousseff oportunidades para el naval gallego en el marco de la construcción de buques off-shore –para empresas como Petrobras–, la reparación o la formación de trabajadores de astilleros brasileños.
Lo hizo tras realizar su primer visita institucional a este país, acompañado del conselleiro de Economía e Industria, Javier Guerra, y de representantes de astilleros gallegos. A su regreso, Núñez Feijóo constató la existencia de «ofertas» por parte de armadores brasileños a astilleros de la Comunidad y de vías de «negocio real» en este país.
Brasil ofrece «enormes posibilidades»
El presidente del Gobierno, tras asegurar que Brasil «es un país que ofrece enormes oportunidades» para las empresas españolas porque «está dando un salto hacia adelante espectacular«, ha explicado que hay «contactos» y ha añadido que las empresas españolas «están muy interesadas».
Según ha agregado, «las inversiones españolas quieren irse» a Brasil y el Ejecutivo «quiere que vayan» porque «interesa» a España económicamente y porque pueden aportar sus conocimientos y experiencia. Por eso, ha insistido en que ha expuesto personalmente a Rousseff el «interés de España y de sus empresas en el desarrollo económico de Brasil y en los proyectos de inversión que está lanzando su Gobierno«.
«Le he explicado que las empresas españolas son muy buenas en muchos sectores, en el sector eléctrico, el sector de la consultoría, en el sector de obra civil. Tenemos magníficos astilleros y hemos hablado efectivamente de cosas que podía hacer Navantia y, por tanto una buena parte de la reunión ha estado dedicada a estos temas bilaterales«, ha aseverado.
Así lo recoge, además, la citada declaración conjunta, en la que se dice que Brasil y España «coinciden en la importancia estratégica del desarrollo de las infraestructuras de transporte, en particular las llevadas a cabo por el método de las concesiones, para lo cual acuerdan estrechar su colaboración en esta materia».
«España apuesta por Brasil, más que nunca»
El presidente del Gobierno ha afirmado rotundo que Brasil es «una potencia del presente» y España «apuesta por Brasil más que nunca». De hecho, ha recordado que el Mundial de fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Río de Janeiro en 2016 sitúan a ese país en el centro de «atención mundial».
Así, Rajoy ha recalcado que un consorcio de empresas españolas está haciendo una obra de infraestructuras «tan importante» como la alta velocidad entre la Meca y Medina. «Y nos gustaría también poder participar en las obras que el Gobierno brasileño ha anunciado que va a poner en marcha», ha apostillado.
Además, ha explicado que en este encuentro han acordado consolidar la cooperación entre ambos países en áreas de futuro como la ciencia y la tecnología. «Y esta cumbre ya ofrece resultados como la firma de un memorándum de entendimiento para la incorporación de Brasil al laboratorio ibérico internacional de nanotecnología en Braga (Portugal)», ha apostillado.
El presidente del Gobierno español ha agradecido además a Dilma Rousseff la reciente firma del acuerdo de establecimiento de centros culturales y ha recordado que en Brasil se encuentra la mayor red de centros del Instituto Cervantes que ahora tendrán «más cobertura jurídica».
Bilateral que sienta bases para una «frutífera cooperación»
En su exposición inicial, Rajoy ha recordado que Brasil es el primer destino de las inversiones de España en América Latina y el segundo en el mundo. De hecho, ha subrayado que con casi 55.000 millones de euros de inversión acumulada, España concentra en Brasil casi la mitad de toda su inversión en América Latina. Y en términos comerciales, se trata del segundo socio comercial de nuestro país con exportaciones que superan los 2.500 millones.
Es más, ha indicado que hay más de 75.000 brasileños que viven en España y unos 100.000 españoles que residen en el país iberoamericano. También ha destacado el hecho de que España sea uno de los países preferidos del programa ‘Ciencia sin fronteras de Brasil’, que, según ha dicho, esperan que se amplíe a científicos e investigadores.
Según Rajoy, la visita de Rousseff «culmina la reactivación del diálogo político bilateral y sienta las bases para una más fructífera cooperación». En este sentido, ha confirmado que en su encuentro han firmado una declaración conjunta para «actualizar y darle más ambición» al acuerdo de asociación estratégica del año 2003.
En parecidos términos se ha expresado la presidenta de la República Federativa de Brasil, que ha señalado que las relaciones entre ambos países son «socios estratégicos» y viven hoy un momento «muy prometedor». «Brasil puede y debe contribuir para que haya más crecimiento económico y posibilidades de solución a la crisis«, ha aseverado.