Enrique Barrera Beitia
A comienzos de este mes la justicia exoneró de manera contundente y definitiva al ex-alcalde socialista Ángel Mato, y a su concejal de Fiestas, Antonio Golpe, de las acusaciones de prevaricación y malversación de caudales públicos vertidas por una productora de espectáculos radicada en A Coruña, cuya propietaria también lo es de la televisión y una emisora locales.
Es difícil creer en casualidades de este tipo, y es evidente el daño hecho a la candidatura socialista. El PP logró su concejal número trece con 1.052 votos, mientras que el octavo guarismo del PSOE fue de 1.033, es decir, si hubiera logrado 152 votos más habría repetido en la alcaldía.
Al tratarse de un puñado de papeletas, esta denuncia torticera determinó el cambio de gobierno local, porque además, el canal televisivo dio la noticia de la denuncia el mismo día en que se celebraba el acto de presentación del candidato socialista, y lo hizo con una escenografía muy medida. El informativo del 3 de mayo de 2023 se abrió con un anuncio publicitario del PP, y a renglón seguido la presentadora dijo textualmente.:
“El alcalde de Ferrol Ángel Mato y el edil de fiestas Antonio Golpe han sido denunciados por un posible delito de prevaricación administrativa y malversación de caudales públicos (…) y mientras, Valentín Formoso avalaba al candidato socialista en el acto de presentación celebrado en el centro cívico de Caranza”.
Viene a continuación información de la campaña del PP y a los tres minutos se retoma el tema indicando que “la magistrada del juzgado de instrucción de lo penal número 3 ve una posible existencia de estos delitos en facturas emitidas por la concejalía de fiestas que podría esquivar la normativa”. El objetivo, según la presentadora, “sería beneficiar a determinadas empresas en detrimento de otras”, y añade que la juez instructora ha pedido copia compulsada al concello de todos los expedientes relacionados con la denuncia.
El informativo no dice que son ellos los denunciantes y lógicamente omite lo sospechoso que resulta no haber denunciado estos informes en cuatro años ante la justicia administrativa, y acudir directamente a lo penal. El digital OK Diario trató el tema varios días, ilustrándolo con una foto en primer plano del ex- alcalde, y detrás de él un ladrón escapando con una maleta repleta de dinero. Todo muy sutil y siendo la comidilla de la campaña electoral.
Aunque ha habido alguna que otra denuncia, en Ferrol tenemos la suerte de que en los últimos cuarenta y cinco años ningún concejal ha sido condenado por delito alguno, pero este episodio sienta un peligroso precedente porque es lícito pensar que pudo haber entendimiento entre partes interesadas para decantar una campaña electoral muy ajustada. Bastaba que este presunto escándalo provocara desafección a uno de cada 67 votantes socialistas, para que hubiera cambio de color político en Ferrol… y es lo que ocurrió.