La policía antiterrorista francesa cree que, pese a la declaración del abandono definitivo de la lucha armada de octubre de 2011, ETA «sigue siendo peligrosa y tiene capacidad para regenerarse»
(EFE).- La policía antiterrorista francesa cree que, pese a la declaración del abandono definitivo de la lucha armada de octubre de 2011, ETA «sigue siendo peligrosa y tiene capacidad para regenerarse».
Esta idea fue expuesta hoy por el comandante de la Subdirección Antiterrorista (SDAT) Laurent Hury, que en el juicio en apelación en París contra los exdirigentes etarras Mikel Albisu y Maria Soledad Iparraguirre señaló que la banda sigue disponiendo de abundantes armas y otro material, aunque hay signos de que cuenta con menos activistas en la clandestinidad que en el pasado.
En respuesta a una pregunta de una magistrada del Tribunal de lo Criminal de París sobre si se constata una reconstrucción del arsenal de armas o de material militar de ETA, el policía aludió al robo en diciembre de 2010 de material informático y para falsificar documentos, así como a las «más de 300 armas» que sigue conservando de otro robo cometido en 2006 en Vauvert, en el sureste de Francia.
En cuanto a la actividad de los miembros de ETA que siguen operando en Francia, recordó la captura en Mâcon el mes pasado de Izaskun Lesaka y de Joseba Iturbide, a los que se incautaron elementos que sirven para elaborar artefactos, armas y cerca de 14.000 euros.
Indicó que en lo que va de año se atribuyen a miembros de la banda entre 20 y 30 robos de coches en Francia, frente a un centenar en 2002, lo que significa que «hay menos clandestinos».
Igualmente comentó que desde 2000 y hasta 2010 se había constatado que año tras año había una disminución de atentados y estimó que «las acciones de las fuerzas del orden tienen algo que ver».
En cualquier caso, dijo que su análisis personal es que «ahora la vía política es la que domina a la militar» en la banda, y que frente a la sumisión en el pasado de las organizaciones políticas o sindicales a ETA, en el momento actual ésta «va a remolque».
Lo ilustró con las declaraciones de la líder de Bildu Laura Mintegui, pidió perdón por las acciones violentas, algo que la organización terrorista no ha hecho por el momento, un ejemplo a su juicio de que el movimiento político «va más rápido de lo que la organización querría».
Interrogado por el fiscal, Jean-François Ricard, sobre las declaraciones de alto el fuego de la banda en 1999 y 2006, el comandante de la SDAT afirmó que «esas treguas sirvieron (a ETA) de resguardo para rearmarse».
Albisu, alias «Mikel Antza», le replicó negando la idea de que la tregua de 1999 se hubiera declarado para reconstituir los arsenales y puso el acento en que en ese momento hubo conversaciones con delegados del Gobierno español.
«En cada tregua el objetivo no es reaprovisionarse (…) Son treguas para buscar salidas políticas» y «si se rompen no es porque ETA hubiera reconstituido sus escondites», afirmó antes de añadir que «desde que ETA dijo que no había más acciones armadas en marzo de 2010, no ha habido ninguna otra».
Hury explicó, por otra parte, que la captura en 2008 en Burdeos del dirigente etarra Francisco Javier López Peña, «Thierry», puso en evidencia por los documentos que se le requisaron «unas luchas de poder interno» en las que se enfrentaban los aparatos político y financiero con los aparatos militar y logístico.
El proceso contra Albisu e Iparraguirre continúa mañana con la intervención de más policías de la SDAT que van a declarar como testigos.