El Ayuntamiento de Fene ha finalizado el jueves 17 de noviembre, las labores de conservación de la pasarela de madera que conecta el paseo de San Valentín con la zona del Regueiro recorriendo la ribera de la ría.
Los trabajos desarrollados en las últimas semanas consistieron en el cambio de distintos elementos dañados por el uso y el paso del tiempo que habían obligado al consistorio a clausurar el trazado en verano por motivos de seguridad.
Las obras desarrolladas por el Ayuntamiento de Fene concluyeron con el chorreado de los 400 metros del paseo hechos en madera, con el objetivo de eliminar el verdín y los sedimentos acumulados «para mejorar su adherencia, incluso en días de agua, y evitar caídas accidentales», explicaba la concejala de Servicios, Sandra Permuy.
En las últimas semanas se reparó la estructura sustituyendo parte de la rampa que da acceso a la playa y todos los tablones que se encontraban en mal estado. Sin embargo, buena parte de la obra se centró en acondicionar la zona de ribazo retirando vegetación y raíces, junto con la preparación de un canal de drenaje que reduzca la humedad procedente de los terrenos colindantes. Una medida que, tal y como aseguraba esta mañana el alcalde, Juventino Trigo, «ayudará a que la estructura se conserve en buenas condiciones durante mucho más tiempo».
Segundo añadió Sandra Permuy, el estado general de esta parte del paseo «requería una intervención urgente por motivos de seguridad» puesto que, prosigue la concejala «había muchas tablas sueltas o deterioradas y por eso decidimos restringir el acceso a comienzos del verano. También solicitamos en varias ocasiones a colaboración de la Demarcación de Costas, que finalmente acometió importantes mejoras».
Los responsables municipales destacan sobre esta última cuestión que el ente dependiente del Ministerio para la Transición ecológica y el Reto demográfico «renovó completamente» el acceso norte al paseo que comunica con el camino del Regueiro. En cuyo caso, la obra próxima a los 30.000 euros consistió en el desmonte de uno de los taludes superiores y en la cimentación de la entrada, además de la colocación de nuevos pilotes de contención tanto en ese punto como en otras zonas del paseo y en la instalación de un nuevo banco en la mitad del recorrido.