La Xunta ha confirmado los dos primeros casos de gripe aviar detectados en Galicia en dos alcatraces localizados en Cangas (Pontevedra) y Valdoviño.
Los dos positivos en influenza aviar de alta patogenicidad en aves silvestres han sido ratificados por el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid), según ha informado este lunes la Consellería do Medio Rural.
Los casos han sido puestos en conocimiento del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para su posterior comunicación a la Comisión Europa, los estados miembros y la Organización Mundial de la Salud, como establece el protocolo de actuación.
Se trata de los primeros casos positivos detectados en Galicia, que corresponden a dos mascatos (alcatraz común o atlántico) identificados en el puerto de Cangas y en una playa de Valdoviño.
El primero arribó al puerto del Morrazo a bordo de un buque pesquero y fue trasladado al Centro de recuperación de fauna silvestre de Carballedo (Pontevedra), mientras que el segundo, localizado en un arenal, fue derivado al CRFS de Santa Cruz de Oleiros (A Coruña).
El mascato es una ave marina que nidifica en el Atlántico norte, donde forman colonias de varios miles de parejas. Las colonias de cría más importantes están en las Islas Británicas, que concentra aproximadamente el 60% de la población mundial.
Como apunta la Xunta, esta variedad de alcatraz nidifica en verano, y aunque la mayoría de los individuos adultos permanecen después en invierno alrededor de las colonias de cría, los más jóvenes migran hacia el sur en dirección a aguas subtropicales o tropicales en el oeste de África.
En estos momentos, los mascatos atraviesan las costas de la península ibérica en su proceso migratoria hacia Mauritania y el Golfo de Guinea, aunque, como incide la Consellería do Medio Rural, «apenas se aproxima a la costa, salvo para anidar».
En este sentido, la Administración autonómica resalta que la detección de caso de gripe aviar en Galicia «no afecta al estatus sanitario oficial de las explotaciones avícolas gallegas, ni implica ningún tipo de restricción de movimientos para las aves y sus productos».
No obstante, apela a reforzar las medidas de bioseguridad en explotaciones avícolas, especialmente las orientadas a evitar el contacto con aves silvestre, y llama a extremar la vigilancia y notificar cualquier sospecha de posibles casos a las consellerías de Medio Rural y Medio Ambiente.
Por último, el Gobierno gallego subraya que hasta el momento «no hay constancia de que el subtipo de virus que durante el último año está afectando a Europa tenga capacidad zoonósica significativa, y por lo tanto su capacidad de transmitirse a las personas resulta muy reducida».
Con todo, recomienda minimizar el contacto «innecesario» con las aves que muestren signos clínicos de enfermedad o se encuentren muertas en el campo, usando medidas de protección en caso de ser necesario recogerlas.