El Juzgado de Instrucción número 2 de Noia ha declarado concluso el sumario de la causa en la que se investigó a J.E.A.G. por una agresión sexual a su cuñada en enero de 2005, cuando tenía 17 años, y ha ordenado su remisión a la Audiencia Provincial de A Coruña para su enjuiciamiento.
La juez indica en el auto, contra el que cabe presentar recurso, que a lo largo de la instrucción se han practicado “cuantas diligencias se estimaron útiles y necesarias para el esclarecimiento y comprobación de los hechos, participación que ha tenido en ellos el procesado y las circunstancias que en su comisión han concurrido”.
El sumario fue incoado en enero de 2005 y, en agosto de ese año, se decretó el sobreseimiento provisional y archivo de la causa, que fue reabierta en marzo de 2018. La jueza ha emitido el auto de conclusión de sumario después de que la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña desestimase, el pasado mes de noviembre, el recurso de apelación presentado por J.E.A.G. contra la resolución del mes de julio que decretaba su procesamiento por la agresión sexual.
En ella, la jueza asegura que de las diligencias de instrucción practicadas “se desprenden indicios bastantes” de que el investigado realizó “actos atentatorios contra la libertad sexual” de la denunciante.
La instructora también señala en el auto de procesamiento que los hechos revisten, salvo ulterior calificación, los caracteres de un delito de agresión sexual con penetración vaginal, con la concurrencia de las agravantes de prevalimiento, pues la víctima era su cuñada y tenía 17 años, y de haber cometido la agresión haciendo uso de arma blanca.
Así, destaca que el relato de la víctima durante todos estos años “ha sido coherente y consistente” y que se ha corroborado “por el resultado de otras diligencias de investigación”. El hecho de que J.E.A.G. haya sido condenado por el asesinato de Diana Quer, cometido en agosto de 2016, y por intentar agredir sexualmente a una joven en Boiro en diciembre de 2017, “refuerza los indicios de veracidad” de la denuncia de su cuñada, según la instructora, pues se constata “el mismo modus operandi”.