Música en Compostela

Julia Mª Dopico Vale

“La melodía será eterna, como el amor, como el agua, como el fuego, como el sol, como la noche, como una flor. Siempre distinta, siempre nueva, pero siempre ella misma, para expresar el sentimiento de la música, para cantar la efusión de nuestros corazones”. Son palabras pronunciadas un día por uno de los grandes, el Maestro Antón García Abril, compositor y profesor de Sinfonismo al que recordamos emocionadamente cuando se celebra la LXIII edición de los Cursos Universitarios Internacionales de “Música en Compostela” que tendrá lugar hasta el 14 de agosto, esta vez de manera virtual dadas las circunstancias del 2021.

Cierto es que no podemos disfrutar del mágico encuentro en la ciudad peregrina en una cita ineludible para muchos que permanecemos vinculados a las musicales jornadas veraniegas desde hace años, compartiendo las enseñanzas, la amplia gama de actividades que las complementan como recitales, conferencias, conciertos…y contando con la esmerada dedicación de maestros cuyo prestigio abala la calidad de un curso que fue creado en 1.958 por iniciativa de Andrés Segovia y el apoyo del diplomático José Miguel Ruíz Morales con la finalidad de poner en valor, preservar y difundir la música española, convirtiéndose el curso desde entonces y hasta ahora en el principal embajador de la misma por todo el mundo.

Esplá, Mompou, Joaquín Rodrigo, Montsalvatge, Halffter, Alicia de Larrocha, Victoria de los Ángeles, Rosa Sabater o el mencionado García Abril…son nombres que se relacionan con “Música en Compostela” y con la mejor música de nuestro país y que convierten además a Santiago en centro de peregrinaje musical para reunirse con “la eterna, la distinta melodía que canta la efusión de nuestros corazones”. Por el retorno: “E ultreia, e suseia, Deus adiuva nos”.

 

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