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El concello de Pontedeume informa al vecindario que queda prohibido el consumo de agua potable hasta nuevo aviso por la situación de las aguas del Eume.
Teniendo en cuenta los datos que arroja la última analítica realizada por Viaqua de las aguas que el concello capta del Eume para consumo humano, en la que se constata que el nivel de turbidez aumentó desde este viernes hasta superar el máximo establecido en el Real Decreto Ley 140/2003 de Calidad de las Aguas, y siendo imposible llegados a este punto que los procesos llevados a cabo en la planta potabilizadora municipal puedan garantizar la calidad de las mismas, el gobierno local se ve en el deber de prohibir su consumo.
Podrá utilizarse para fregar o lavarse, pero no para consumir
Desde que se detectó esta situación en el río hace cinco días, desde el concello y a través de la empresa que gestiona el servicio municipal de aguas, Viaqua, se vienen realizando de forma continua tanto analíticas de las aguas que se captan del Eume, como controles de las mismas en la planta potabilizadora durante las 24 horas del día. La situación de la turbidez de las aguas comenzó la empeorar en la tarde del viernes, superando en la mañana de este sábado los límites establecidos para el consumo humano.
El concello, a través de la Policía Local, puso en conocimiento del ente Augas de Galicia, responsable de la cuenca del río y de la calidad de las aguas del mismo, la situación del Eume a principios de semana. En la mañana de este sábado y ante la situación descrita con anterioridad, desde Viaqua se remitió informe a Sanidad indicando que “con motivo de los vertidos existentes al río Eume, que se vienen produciendo continuamente a lo largo de toda la semana y que están alterando su calidad y características morfológicas, ante el aumento de la turbidez de las mismas en las últimas 24 horas, la ETAP municipal no está capacitada para garantizar en continuo que la calidad del agua sea apta para consumo”.
Esta turbidez existente en el punto de captación del Eume, que oscila entre 70-100 NTU, altera las características morfológicas del río y la ETAP no está diseñada para poder tratar estos valores tan altos, existiendo por tanto por consecuencia de incumplir los niveles de turbidez establecidos en el R.D 140/2003, que regula los parámetros de calidad de agua de consumo.
Desde el concello se indica que «lamentamos la situación, los perjuicios a la ciudadanía generados por la misma, y trabaja conjuntamente con Viaqua y el ente Augas de Galicia para encontrar una solución lo antes posible».
