El colectivo de camioneros encargados de transportar el carbón desde el puerto exterior de Ferrol hasta la central térmica de Endesa en As Pontes de García Rodríguez iniciarán una serie de encierros para demandar la reactivación de este centro industrial. Además, alcaldes del norte de las provincias coruñesa y luguesa reclaman la reactivación de la empresa.
La central acumula ya cuatro meses sin actividad, debido al encarecimiento del precio del CO2. Las movilizaciones finalizarán con una reunión en el Ministerio de Industria, el 10 de septiembre, en Madrid, en donde reclamarán soluciones.
Así lo ha asegurado el alcalde de As Pontes, Valentín González Formoso (PSOE), minutos antes de reunirse con representantes de los gobiernos municipales de A Capela, As Somozas, Cabanas, Cerdido, Cariño, Fene, Ferrol, Moeche, Narón, Ortiguiera, Pontedeme, San Sadurniño y Valdoviño en la provinicia de A Coruña, además de los lucenses de Vilalba, Xermade y Lugo. También ha estado presente el presidente del colectivo de Transportistas del Carbón de As Pontes, ‘Cholo’ Bouza.
ESPECULACIÓN
El regidor de la localidad donde está ubicado este complejo industrial ha abundado que en el encuentro en Madrid ante Industria se hará entrega de un documento para que «una central que se está adaptando a la normativa ambiental europea más exigente no tenga que sufrir por culpa de la especulación de los precios del CO2, que afecta ahora a As Pontes, pero que va a afectar a muchas otras industrias gallegas y estatales».
«No se puede permitir que el aire que respiramos pueda ser una mercancía como el petróleo o las joyas, un aire que se está comercializando actualmente a 25 euros por tonelada, provocando que la central térmica esté parada y tenga un futuro negro, negro como el carbón», ha incidido el también presidente de la Diputación de A Coruña.
González Formoso ha detallado que esta segunda reunión de alcaldes da continuidad a la celebrada en el mes de julio y en la que se había iniciado «una reclamación conjunta de toda la comarca al Gobierno central y al Gobierno comunitario» para que «una instalación que se está adaptando a la normativa europea, con una inversión de 230 millones de euros, acometiéndose a fecha de hoy, y con 900 empleos directos e indirectos afectados, es un sin sentido el tenerla parada, con el efecto que tiene sobre la economía de la comarca», ha sentenciado.
RESPONSABILIDAD DEL GOBIERNO
El conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, se refirió a la situación de la central de Endesa, en las Pontes, y responsabilizó al Gobierno del ‘parón’ de cuatro meses en la planta, por romper » el equilibrio» al eliminar el céntimo verde a los hidrocarburos, excepto para las centrales de carbón, «que ahora están en desigualdad». «Por eso As Pontes lleva parada 4 meses (…) es una responsabilidad directa de la inacción del Gobierno, o una decisión premeditada de poner en dificultades a 750 familias y a la comarca de Ferrolterra», incidió.
El titular de Economía, Empleo e Industria de la Xunta recordó el compromiso del Ejecutivo de permitir la actividad en aquellas centrales que hicieran inversiones para adaptarse a la directiva europea de emisiones, y subrayó que Endesa «está invirtiendo 217 millones de euros para cumplir ese compromiso».
Por eso, apeló a la «corresponsabilidad» del Gobierno en el mantenimiento de la actividad en esta central y pidió que tome «decisiones» y medidas complementarias, como recuperar mecanismos de pagos de compensación o establecer retribuciones específicas para aplicar otras tecnologías, como la biomasa.
Asimismo, Francisco Conde instó al Gobierno de España a abordar el proceso de transición ecológica de un modo «conjunto» con el resto de países de la UE, y pidió una «transición homologable» la esos Estados, de modo que sea «lo suficientemente ordenada» como para no generar impacto negativo a corto plazo en los empleos y la actividad industrial.
«La transición no consiste en llegar el primero, sino en establecer medidas ordenadas, que generen impacto positivo desde el punto de vista ambiental, y no tengan repercusión negativa en términos de empleo», matizó, y volvió a pedir que España «pueda desarrollar su ‘ mix energético’ de forma competitiva», como hacen otros países, como Alemania.