La subdelegada del Gobierno en A Coruña, Pilar López-Rioboo, y el alcalde de Ares, Xulio Iglesias, mantuvieron una reunión para analizar diversas actuaciones y proyectos relativos al ayuntamiento. En la reunión,celebrada en la sede del Ayuntamiento, estuvo también presente el jefe de la Demarcación de Costas de Galicia, Rafael Eimil, y en ella analizaron diferentes proyectos de Costas para el Concello.
En la reunión se analizaron de forma especial las diferentes actuaciones desarrolladas por la Demarcación de Costas en el municipio, que fueron muy demandadas y que se acometieron en estos últimos meses.
Según recordó Rafael Eimil, en este año y por medio de la actuaciones de mantenimiento y conservación, el Ministerio para la Transición Ecológica acometió la reparación y mejora de los accesos a las playas y paseos del ayuntamiento.
Destacó en este sentido el acondicionamiento y mejora del acceso al arenal de Seselle, para lo cual se sustituyó la pasarela de madera por otra de similares dimensiones pero aplicando criterios de sostenibilidad ya que se aprovecharon y reutilizaron materiales naturales de otras actuaciones.
También se instaló una escalera de acceso de tres metros de ancho en la zona del Esteirón que sirve para comunicar con el paseo marítimo, utilizando también madera reciclada y dotando a la infraestructura de un pavimento continuo de suelo estabilizado con cemento para evitar la escorrentía, con pasamanos de madera.
En su visita a Ares, la subdelegada, acompañada por el alcalde y el jefe de la Demarcación de Costas, visitó la playa de Chanteiro, para comprobar los resultados de las obras acometidas en la zona y que permitieron recuperar un tramo de la senda litoral norte de 165 metros. Fue necesaria la sustitución de un vial de firme asfáltico por una senda de hormigón impreso, quedando habilitado para uso preferente peatonal.
La actuación se completó con la adecuación del entorno natural mediante césped y mobiliario urbano, generando un mirador sobre la playa, además de la instalación de drenaje, pasamanos de madera y la mejora de las señales de acuerdo a los valores ambientales de la zona.
Es preciso recordar que esta zona presentaba un estado de degradación considerable, de tal forma que se había convertido el entorno de la ensenada y de la playa en espacios carentes de la vitalidad acorde a los valores medioambientales necesarios, ya que además en verano estos espacios eran invadidos por los vehículos de manera indiscriminada, lo que deterioraba el uso y disfrute de este borde costero.
La reciente construcción de un aparcamiento disuasorio por parte del ayuntamiento, en la primera línea de playa, permitió recuperar el uso peatonal de los antiguos viales, restableciendo así una zona de mirador y descanso para los usuarios y que sirve también de comunicación con la importante red de sendas que circunda el monte Faro.
Para el desarrollo de estas actuaciones fue necesario la inversión de 72.000 euros por parte de la Demarcación de Costas.