Aún a pesar de estar en época electoral, no voy a hacer un análisis político de una de las noticias de las que más se está hablando en estos días en Ferrol. Como amante de mi ciudad natal y de su Patrimonio, y si pongo la palabra Patrimonio en mayúsculas por la importancia que tiene no sólo en el devenir de un pueblo como tal, sino en su desarrollo turístico, me hago una pregunta. Si tal como se dice es necesario cercar la Plaza de Armas por el peligro que puede haber de derrumbe, ¿Por qué se ha esperado hasta ahora y no se han realizado ya las obras, hace algún tiempo?, ¿Se ha pensado en la imagen que da ese cercado ante la gente que va a llegar a nuestra ciudad por motivo de la Semana Santa, una de las épocas por no decir la que más potencial turístico arrastra en nuestra ciudad? Quiero imaginarme que un ayuntamiento, piensa siempre en el bien de su ciudad y sus habitantes, a la vez de las personas que nos visitan y antes de tomar la medida en cuestión se habrán sopesado todos los pros y los contras y se habrá tenido en cuenta el bien común, pero con el cariño al sitio que me vio nacer, no se ha podido gestionar este tema de otra manera.
Es tan difícil pedir a los políticos alturas de miras y que en ciertos temas pueda haber consenso y si hay que hacer actuaciones, se piense en las épocas mejores para hacerlas, o sea aquellas que causen un menor perjuicio para la gente, y un menor impacto económico para la urbe.
Hay ciertas decisiones, que según se tomen, su impacto puede ser mayor o menor, estamos tan boyantes y nos van las cosas tan bien, para no hacer cierta clase de análisis, para cuando vamos a pensar en el bien común, aunque a veces sea en contra de nuestras ideas. Un alcalde debería de estar por encima de cualquier idea, y pensar sobre todo en su ciudad, aunque su decisión en ciertos momentos pudiera estar en contra de su ideología
Sin más, vuelvo a mi planteamiento inicial, sin entrar en la necesidad de la actuación la cual no dudo, de verdad es este el momento más oportuno para hacerla. Luego nos extrañaremos de que Ferrol va perdiendo importancia día a día y se desangra como un paciente moribundo. No sólo son importantes las decisiones a tomar, sino el momento en que se toman. Y ya fuera de ideologías, no me queda sino desear que esta Semana Santa que viene, sea plena para nuestra ciudad, y que todos aquellos que tengan la suerte de recalar en sus calles en estas fechas se lleven el recuerdo más pleno que puedan llevarse, será bueno para todos. Para todos aquellos creyentes, o amantes de las procesiones que todo salga de diez y el tiempo acompañe y para quien no que paséis una buena semana.
(*)-Ferrolano. Doctor en Humanidades