El nacionalista Juventino Trigo, que perdió la alcaldía de Fene el pasado 6 de abril en una moción de
censura, ha acusado al actual regidor, el popular Gumersindo Galego, de «paralizar, mediante un decreto de Alcaldía» la apelación judicial para clarificar la venta de diversos objetos como chatarra. A todo elo tuvo rápida contestación del actual alcalde señalando que en los juzgados ya se había archivado la causa por segunda vez y que lo único que podía suponer el recurrir nuevamente serían nuevos gastos para el concello, con abono de costas que repercuten en todos los vecinos.
El portavoz del BNG en el Consistorio ha mostrado una resolución «firmada por el propio» Gumersindo Galego, en la que le ordena a los letrados y procuradores del Ayuntamiento «desistir del recurso subsidiario de apelación» después de que el anterior gobierno municipal decidiese «recurrir la decisión» del Juzgado de Instrucción número 3 de Ferrol, que había decidido archivar el caso.
SOBRESEIMIENTO PROVISIONAL
Con todo, el Juzgado de Instrucción número 3 de Ferrol decidió en diciembre de 2017 el sobreseimiento provisional de las diligencias en las que, conforme ha señalado Trigo, «se reconocía la existencia de las irregularidades susceptibles de ser consideradas como un delito de malversación de caudales públicos».
En este momento, ha recordado que el Ayuntamiento de Fene presentó recurso «con la única finalidad
de que el asunto no quedara en nada, de que se esclareciera lo ocurrido y que se depuraran todas las responsabilidades que pudiera haber».
VERSIÓN DEL ALCALDE
Enfrente, el alcalde de Fene, Gumersindo Galego, ha justicado su decisión de dar instrucciones para desistir en la presentación del recurso subsidiario de apelación contra el último auto después de que, «por segunda vez, se reiterara el archivo de la causa».
Según Galego, el auto de 7 de mayo, además de cuestionar que el Ayuntamiento se personase, dice literalmente que «existe un mínimo indicio que apuntale que el importe de tales ventas se destinara a beneficio propio». «Todo lo contrario, existe soporte documental y
base para considerar que lo recaudado se destinó al beneficio municipal», ha incidido.
Por ello, ha insistido en que hay «un argumento contundente que llevó al Ayuntamiento a desistir de continuar apelando» ya que las mismas «sólo trajeron consigo la imposición de costas procesales y el consiguiente desembolso económico por parte de todos los vecinos de Fene».