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El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, presentó en la mañana de este lunes en el puerto de Redes (Ares) la Guía de Cores e materiais, el manual, aseveró, para un paisaje urbano cuidado, harmonioso y coherente. «Una guía de mano contra el feísmo para garantizar una diversidad armoniosa en el patrimonio arquitectónico gallego», dijo, y subrayó que, para que sea realmente útil, la sociedad gallega deberá asumir sus recomendaciones como propias.
Feijóo,que estuvo acompañado por la Conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato; el alcalde de Ares, Julio Iglesias, el decano del Colegio de Arquitectos de Galicia, Antonio Maroño; y el delegado de la Xunta en A Coruña, Ovidio Rodeiro; explicó que este manual está elaborado desde un amplio conocimiento de la tradición gallega. No en vano en él trabajaron durante más de un año 34 profesionales con formaciones diversas -desde arquitectos hasta historiadores, pasando por arquitectos técnicos, ingenieros forestales y licenciados en Bellas Artes-.
Teniendo como base las doce áreas que recoge el catálogo del paisaje, estos profesionales analizaron cerca de 3.800 edificaciones de todo tipo en núcleos rurales, urbanos y periurbanos y polígonos industriales. De tal manera que las indicaciones que se recogen optimizarán la manera en el cual las construcciones se integran en el paisaje, tanto los edificios nuevos como los rehabilitados.
Cuatro tipos de edificaciones
Durante el acto de presentación, el responsable del Gobierno gallego subrayó que en cada una de las áreas, la Guía de colores y materiales distingue cuatro tipos de edificaciones, cada una con sus recomendaciones concretas. Así, el primer tipo es la arquitectura tradicional y su evolución hasta mediados del siglo XX, dentro de la que se recomienda emplear para sus rehabilitaciones técnicas tradicionales, piedra de la zona en los muros y carpinterías de madera.
En segundo lugar, la arquitectura reciente engloba toda la construida desde los años 60, con distinciones entre la urbana y la rural. En estos casos, la guía ofrece libertad de materiales y se centra en los colores, que deben ser coherentes con las del área en la que se encuentran a haber acabado mate.
La tercera tipología que se recoge son las construcciones aisladas en suelo rústico. Y la cuarta, las edificaciones industriales.
Asimismo, la guía establece también límites máximos de luminosidad y saturación para todos los colores para garantizar la armonía del conjunto.
A lo largo de su intervención, Feijóo subrayó que los catorce tomos de la guía se ponen desde hoy a la disposición de todos los gallegos y precisó que que para convertirla en un patrimonio colectivo, se abrirá un proceso de participación con todos los actores del ámbito urbanístico y paisajístico, desde ayuntamientos hasta colegios y organizaciones profesionales.
Antes de que finalice 2018 estarán aprobadas las Directrices del paisaje
Como ejemplo del esfuerzo de la Xunta por mejorar el paisaje urbano de Galicia, el presidente del Ejecutivo autonómico anunció que antes de que finalice 2018 estarán aprobadas las Directrices del paisaje.
En esta misma línea, recordó que en la actualidad Galicia tiene una mayor calidad urbanística que la que tenía en 2009. «A mediados de 2018 tendremos un Plan básico autonómico. Y la finales de 2019 estarán aprobados los primeros planes básicos municipales, que facilitarán la ordenación urbanística en los ayuntamientos de menos de 5.000 habitantes», dijo.
Feijóo concluyó destacando el trabajo hecho de cara a la ordenación urbanística y a la puesta en valor del paisaje, ya que todo eso, aseguró, ayuda a compatibilizar crecimiento económico con respeto al paisaje; a lograr una tierra mejor en la que vivir y una Galicia más armoniosa.
Una nueva cultura ambiental
«El respeto al medio natural no tiene por que ser un freno al crecimiento económico, sino que puede ser un catalizador que lo haga más sostenible y duradero y lo traduzca en más calidad de vida. Esta es la filosofía de la que debe partir el trabajo por una nueva cultura ambiental», sentenció, incidiendo en que esta es la filosofía que guió todos los documentos que se llevan elaborado en este sentido como las Directrices de ordenación del territorio, el Plan de ordenación del litoral, la nueva Ley del suelo, la Ley de medidas urgentes, los instrumentos de ordenación urbanística de carácter provisional, la Estrategia del paisaje gallego, y el Catálogo, que divide el territorio en 12 grandes áreas paisajísticas.
