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El portavoz del Partido Popular de Pontedeume, Javier Crespo, ha calificado de «pasotismo y la dejadez» la actitud del gobierno local por los problemas con el suministro y el abastecimiento de agua que están sufriendo los vecinos de algunas parroquias del municipio. En concreto, Crespo aseguró que «el Concello tiene paralizadas varias de las obras de abastecimiento que dejó aprobadas para su ejecución el anterior gobierno de los populares y que permitirían mejorar el sistema de suministro de agua en el municipio».
Sobre este asunto, el popular afirmó que «casi un año y medio después de tomar posesión como alcalde, el señor Fernández todavía no ha movido ni un dedo para empezar a ejecutar estos proyectos porque, a su juicio, el gobierno local está más preocupado de llenar de flores las calles que de ocuparse de los temas importantes que afectan al día a dia de los vecinos».
Sin agua en casa
Asimismo, Crespo exigió al gobierno local que «deje de tirar balones fuera escudándose en que no hay dinero y, por un momento, se ponga en la piel de esos vecinos que llegan a casa y no pueden ducharse ni lavar la ropa», asegurando por ello que «si hay dinero para colocar macetas y poner plantas, tendrá que haberlo para solucionar el tema del agua, que es lo realmente importante», indicó el popular, quien defendió que su formación estableció siempre como una de sus prioridades terminar con los problemas de abastecimiento de agua en Pontedeume.
Además, desde el grupo municipal de los populares recordaron la existencia de un proyecto común con el Concello de Cabanas que daba la posibilidad de cambiar la tubería general de abastecimiento desde la depuradora, la cual el actual gobierno local «tiene aparcado en un cajón».
Por último, Crespo instó a que el regidor «se ponga las pilas en este y en otros asuntos para evitar que Pontedeume siga perdiendo inversiones que estaban comprometidas por otras administraciones como ha sucedido con el proyecto para el saneamiento de la Plaza del Conde, de 40.000 euros, o la nueva guardería que se iba a construir en la parcela del CEIP Couceiro Freijomil, de 1 millón de euros».
