Sobre las ocho de la mañana de este miércoles se declaró un incendio en el interior de una vivienda en la calle Nueva de Caranza, afectando a algún enser, y sin daños personales aunque en principio pudo afectar seriamente a un bebé y a un pero.
Sobre la hora indicada una señora que llevaba a su hijo al centro escolar al pasar delante de la librería sita en el número 140-142 de la calle Nueva de Caranza señaló a la propietaria de la misma que veía salir un humo muy negro de una ventana del segundo piso del edificio.
Rápidamente la comerciante avisó a la Policía Nacional, llamando al 091, y asimismo se dedicó a llamar en los timbres del portal avisando a todos los vecinos.
“Escuche antes unos ruidos como estallidos, pero no le di importancia” nos dice la responsable de la papelería.
Asimismo el residente en el segundo piso despertó al escuchar llantos del bebé, que estaba en otra habitación, y comprobó que la misma estaba cubierta por el humo y que se había caído sobre la cuna un “poster calefactable” , sin lastimar a la criatura, lo que originó el fuego que afectó en gran manera a un colchón.
Rápidamente evacuó a la criatura hasta el tercer piso, mientras llegaban los Bomberos ferrolanos con toda la plantilla de guardia y con un gran despliegue de tres vehículos entre ellos el camión-escalera por si era necesario entrar en la vivienda por las ventanas
También se encontraban en el lugar efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Local. El tráfico de vehículos fue cortado en el tramo comprendido entre las calles República Argentina y Venezuela.
En uno de los momentos de los trabajos de extinción uno de los bomberos bajó a la calle un pequeño perro que encontraron en la vivienda afectada, si bien poco después lo subieron al tercer piso, donde se encontraba el inquilino.
Al parecer los ocupantes de la vivienda son una pareja de miembros de la Armada. La mujer se encuentra en estos momentos fuera de Ferrol a bordo de uno de los buques .
El incendio llamó la atención de un buen número de personas, entre las que se encontraba el propietario del piso, pendiente de que finalizase la operación de sofocar el incendio para comprobar los daños.
La labor de los bomberos se centró el sofocar el fuego en la habitación y utilizar los medios de ventilación forzada , tanto en el piso como en las escaleras del edificio, en donde se había concentrado una buena cantidad de humo.
Sobre las nueve menos cuarto de la mañana se restableció la circulación de vehículos.