El 11 de mayo de 2012 el Tribunal Supremo declaró ilegal la actividad de Reganosa en la ría de Ferrol, pero para los poderosos la justicia está de adorno, pues además de seguir entrando gaseros, ahora quieren ampliar la actividad. En fecha reciente Reganosa encarga a la empresa Ghenova que diseñe un buque para suministrar gas a otros navíos. Olvidándose de la sentencia, con el nuevo proyecto multiplican el riesgo de tragedia para Ferrol y comarca.
La Xunta de Galicia, que participa con el 17,5% en Reganosa, debería volver a leer la norma UNE-EN 1532: 1998, sustituída por la UNE-EN ISO 28460:2011, que con relación a los buques gaseros dice: los buques cargados con gas natural licuado puedan, en caso de emergencia, salir a mar abierto en el tiempo más breve posible y sin ayuda ajena. Esto es imposible por el canal de entrada a la ría de 4,5 km de largo, donde hay que hacer cinco cambios de rumbo; entonces los buques necesitan la ayuda del práctico tanto para entrar como para salir, y además sólo se puede hacer con pleamar.
La Xunta de Galicia debería dejar ese negocio ilegal y velar por la seguridad de Ferrol y comarca.
Andrés Sanjurjo Martínez