El Concello de San Sadurniño, la Casa do Mel de Goente y las asociaciones de vecinos del territorio han estado organizando durante estos días charlas informativas sobre la avispa velutina y sobre cómo luchar contra la plaga que acecha la comarca. Las reinas fecundadas el pasado año han salido ya de sus enjambres para formar nuevas colonias. Por cada una que se capture habrá un nido menos del que preocuparse más adelante.
Las charlas se llevaron a cabo concretamente en Santa Mariña, en Igrexafeita y el pasado lunes, día 2, en Naraío. La siguiente que se realice será el próximo día 20 del presente mes, en Ferreira, quedando todavía fechas libres durante este mes para que las entidades del territorio las soliciten contactando con el departamento de Cultura y Participación vecinal.
En cuanto al contenido de las mismas, se explica primeramente a saber distinguir las avispas del país (crabro) de la velutina y, sobre todo, del avispón europeo –también conocido como carrizo-, así como su ciclo vital que se inicia con el nacimiento de las reinas a finales de otoño y su marcha del nido para hibernar aproximadamente hasta el mes de febrero. Es en esta época hibernal cuando despiertan de su letargo y empiezan a trabajar para formar un nuevo nido que más adelante, durante la primavera, abandonarán con un pequeño ejército de avispas obreras con las que formarán la colonia definitiva.
Desde que la plaga llegó a la comarca la mayor parte de los esfuerzos para combatirlos fueron en vano: se retiraron y destruyeron los nidos con los que se encontraban, sin saber bien la dimensión de la invasión al desconocerse aquellos nidos ocultos por la zona, como en montes y zonas húmedas.
Tras varias semanas de frío y humedad, es probable que se empiecen a apreciar por la comarca las primeras avispas asiáticas, muy seguramente cerca de las camelias al ser los arbustos que primero florean. Según apuntan los expertos, uno de los lugares más idóneos para situar una trampa, como así las zonas de ría, sitios húmedos de las casas, cabañas o en las proximidades de árboles frutales que entrarán en floración en las próximas semanas.
Si bien en el mercado hay ya trampas y atrayentes comerciales, el más sencillo y eficaz es el que se hace con una botella de plástico, a la que se le practica un orificio para introducirle por un lateral el cuello de otra botella más pequeña. Dentro se deja un vaso o vaso y medio de líquido atrayente preparado en un 40% de vino blanco, en otro 40% con cerveza negra y un 20% con zumo de arándanos o licor de frutas. Cabe destacar que las trampas son aún más efectivas si se cubre la botella con un plástico de celofán amarillo.
Para evitar que las abejas, las avispas del país, u otros insectos queden atrapados será necesario hacerle también en la parte superior tres o cuatro agujeros de unos 5,5mm de diámetro por lo que puedan escapar, mientras que las velutinas quedarían dentro.
Las trampas habrá que vaciarlas cada quince días, pudiendo aprovechar el líquido atrayente con un colador. Se aconseja además no lavar los recipientes y dejar dentro algunas avispas muertas en el propio líquido.
Cabe destacar que durante el verano el efecto es mínimo, al cambiar la dieta de la velutina en proteínas para alimentar las crías que consigue rapiñando abejas y otros insectos. Otro momento ideal para colocar trampas es desde finales de verano y durante el otoño y principios de invierno, cuando las reinas salen de los nidos secundarios para iniciar su letargo.