Barreras y Navantia construirán los dos floteles de Pemex

La subsidiaria de la petrolera mexicana Pemex, PEP (Pemex Exploración y Producción), ha adjudicado la construcción de sus dos floteles a los astilleros gallegos Hijos de J.Barreras y Navantia-Ferrol.

 La resolución del concurso, al que las dos empresas gallegas concurrieron en alianza con PMI –otra filial de Pemex– se ha conocido pasadas las 20,00 horas de este martes, hora mexicana, las 3,40 horas del miércoles en España.

Larga espera

Hubo que esperar hasta las cuatro menos veinte de la madrugada (hora española) para que Pemex hiciese público el nombre de los astilleros que se encargarán de construir sus dos buques hoteles. Al final, Barreras y Navantia se llevaron el gato al agua y consiguieron, de la mano de la filial de la petrolera azteca PMI, ser los adjudicatarios de ambos barcos.

Estaba previsto que el fallo de la adjudicación de los floteles se conociese a las cinco de la tarde hora mexicana, no obstante, la reunión del consejo de Pemex Exploración y Producción (PEP) se alargó más de dos horas por encima de lo previsto. La tardanza hizo que muchos comenzasen a pensar en un nuevo retraso por parte de la petrolera que preside Emilio Lozoya, que acumulaba ya hasta cinco intentos fallidos de licitar los buques

El coste de construcción es de 407 millones de dólares cada una de las embarcaciones (298 millones de euros). El objetivo de los floteles es servir para alojar a los trabajadores dedicados al mantenimiento y construcción de infraestructura en zonas marinas.

El plazo de los servicios contratados por la petrolera es de 10 años (3.653 días naturales), a partir del 13 de julio de 2016, por lo que se extenderá hasta el 13 de julio de 2026.

La empresa ha explicado que, tras la presentación de las propuestas técnicas y económicas, la oferta presentada por PMI Norteamérica S.A. de C.V. ha resultado ganadora en ambas partidas «con el precio más bajo solvente», de entre las siete propuestas que se seleccionaron para la última fase.

Nota de Pemex

El proceso, añade Pemex en una nota de prensa, ha sido «totalmente transparente y auditable» y se realizó «con estricto apego a las normas aplicables».

La adjudicación se ha conocido tras sucesivos retrasos en la fecha para hacer público el fallo, que inicialmente estaba previsto para septiembre de 2013, se aplazó a noviembre y, posteriormente, al 6 de diciembre, para volver a cambiar la fecha y fijarla en el 30 de diciembre. No obstante, la empresa justificó un nuevo retraso, hasta el 28 de enero de 2014, por la «imposibilidad» de emitir «en tiempo y forma» la resolución.

Nota de Navantia

Pasadas las ocho de la mañana de este miércoles el gabinete de prensa de Navantia facilitaba la siguiente nota:

«PEMEX Exploración y Producción (PEP) ha adjudicado hoy a PMI la construcción de dos unidades habitacionales flotantes (Floteles). La oferta elegida de PMI se basa en las propuestas presentadas por los astilleros españoles Navantia y Barreras.

Navantia ha sido seleccionada por su capacidad tecnológica para construir cualquier tipo de barcos, así como por su competitiva oferta económica. La construcción del flotel supone 1 millón de horas de trabajo, además de 130.000 de ingeniería, lo que proporciona a Navantia trabajo asegurado durante 30 meses.

El buque flotel, que será construido en las instalaciones de la Ría de Ferrol es un buque de alojamiento del personal que trabaja en las plataformas petrolíferas. Está diseñado para albergar a 700 personas y se caracteriza por su capacidad de posicionamiento dinámico.

Características del buque:

Eslora, 131, 20 mts,

Manga 27 mts,

Peso muerto 7000 tns

Capacidad de Acomodación 700 personas

Posicionamiento Dinámico DP3

Clasificación DNV

Dos comarcas vinculadas al naval

Con el anuncio de este miércoles se confirma el encargo de las dos embarcaciones para Galicia, de las que una se construirá en el astillero vigués y la otra en las gradas de la empresa pública Navantia en Ferrol.

Ambas comarcas, muy vinculadas al naval, se han visto golpeadas en los últimos años por la ralentización en la actividad del sector, influida también por la suspensión del ‘tax lease’, aunque Vigo encara este año con la previsión de recibir encargos y a la espera de los trabajos que, precisamente, Pemex pida a Barreras.

En Ferrolterra, la carga de trabajo que supondrá el flotel aliviará la situación del sector naval, que perdió 3.700 empleos desde septiembre de 2011, de acuerdo con los cálculos del comité de empresa de Navantia, que había advertido que, de no lograr este encargo, no habría posibilidades de cerrar contratos este año. Los astilleros de la comarca no tienen ningún barco en construcción desde que el pasado diciembre salió de las gradas el ‘Adelaide’.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunciaron en abril de 2012 un acuerdo para construir en astilleros gallegos barcos para la petrolera mexicana, un pacto que se escenificó en septiembre de ese año en una reunión en Santiago entre representantes de Pemex y el Gobierno gallego.

Además de los contratos de estos dos floteles, la petrolera se ha hecho con el control del astillero vigués Barreras, tras adquirir el 51%, y ha avanzado que se le encargarán, al menos, cinco barcos, a los que se podrían sumar otros tres en el primer trimestre de 2014, además del flotel del concurso resuelto este miércoles, lo que eleva el total a nueve contratos.

 A la sexta fue la vencida

A la sexta, fue la vencida. Por fin PEMEX se ha aclarado y decide que Barreras y Navantia construyan los dos floteles previstos y anunciados hace ya tiempo por el presidente de la Xunta, Núñez Feijóo.

El sector naval gallego confíaba en que Pemex Exploración y Producción (PEP), filial de Petróleos Mexicanos (Pemex), resolviese favorablemente el concurso sobre los floteles a los que aspiran Hijos de J. Barreras en Vigo y Navantia en Ferrol y que ambos barcos “se vengan para Galicia”.

El fallo del gigante azteca de los hidrocarburos, que ya se retrasó en cinco ocasiones, estaba previsto para las cinco de esta tarde, hora mexicana (medianoche en España). Los astilleros gallegos competían con otras ocho ofertas de factorías mexicanas, nórdicas y asiáticas.

Estos buques (su denominación original es la de accommodation floatels), especializados en alojar y dar servicio a los trabajadores de las plataformas offshore de petróleo y gas), estaban valorados en unos 145 millones de euros cada uno.

Declaraciones previas

“Confiamos y deseamos que los dos barcos se vengan para Galicia”, reconocía este martes, día 28, el secretario general de la patronal metalúrgica gallega (Asime), Enrique Mallón.

Hijos de J. Barreras partía como favorito para hacerse con el primero de los buques, ya que su oferta era la más económica y la mejor desde el punto de vista técnico (la factoría naval viguesa construyó en 2011 uno de los floteles más avanzados del mundo, el Edda Fides, arriba, en la foto).

A esto se sumaba el hecho de que PMI Comercio Internacional, subsidiaria de Pemex, sea ahora el máximo accionista de la empresa, con el 51% del capital.

Navantia estaba expectante

Navantia, por su parte, que también concurría a la licitación de la mano de PMI, aspiraba a hacerse con la segunda unidad, aunque tuvo que imponerse a una oferta, la del grupo mexicano Evya, de menor precio (que no se trata de un flotel en sí, sino de una plataforma adaptada para la misma función).

Completaban el resto de propuestas por los dos floteles las firmas Posh Semco, Servicios Marítimos de Campeche, Grupo Evya (que también ofertó para la primera unidad), Transportación Marítima Mexicana, Técnicas Marítimas Avanzadas, Mexiship Ocean, Cotemar y Tecnologías Relacionadas con Energía y Servicios Especializados.

“Si no contratamos ese buque, el flotel, este año no habrá posibilidades de tener otro contrato; o este año trabajamos en ese buque o no será en ninguno», ha asegurado Lito Blanco, secretario del Comité de Empresa de Navantia Ferrol. En el astillero se esperaba con «tensa calma» en las horas previas a que Pemex comunicase el resultado de la adjudicación de los dos floteles.

Por su parte, uno de los representantes de los trabajadores en Barreras, Fernando Landesa (CIG), ha indicado que tanto la dirección de la empresa como los empleados tenían confianza en que construirán uno de los buques. Están, ha dicho, expectantes y con «incertidumbre», después de «varias demoras» para tomar la decisión.

 «Nos jugamos la carga de trabajo»

Lito Blanco, de Navantia, ha señalado que el ambiente en el astillero público ferrolano era de máxima «expectación», dada la situación actual en la que se encuentra, sin carga de trabajo en la parte de construcción desde que en diciembre partió el segundo y último buque contratado por Australia.

«Si hace tres o cuatro meses hablábamos de estar al borde del precipicio hoy estamos cayendo, nos estamos jugando si va a haber carga de trabajo«, ha manifestado este martes, día 28, horas antes de conocerse el acuerdo de PEMEX, si bien ha recordado que el flotel tampoco va a ser la «solución definitiva«, porque tan solo generaría ocupación «para 350 o 400 personas de forma sostenida en este tiempo».

La plantilla principal de Navantia en Ferrol y Fene cuenta con 2.300 trabajadores. En la actualidad, debido a su situación de subocupación, están asumiendo tareas que anteriormente desarrollaban empresas subcontratadas. Esto ha provocado la destrucción masiva de empleos en las compañías auxiliares.

Desde septiembre de 2011, según los datos del Comité, se han quedado sin empleo 3.700 personas que trabajaban directamente en Navantia, a través de subcontratas. De estos, cerca de 800, desde principios de diciembre. En la actualidad, apenas quedan 400 operarios de auxiliares en el astillero ferrolano.

Está previsto que este miércoles, día 29, a las 10,30 horas, los trabajadores de Navantia Ferrol participen en una asamblea en la que se abordará un nuevo calendario de movilizaciones y se analizará el resultado de la reunión de Pemex.