Rosario Porto, la madre de Asunta Basterra Porto, la niña hallada muerta en una pista forestal del municipio coruñés de Teo el 22 de septiembre, ha mantenido este jueves, día 28, su inocencia en su segunda declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago, José Antonio Vázquez Taín, tras el levantamiento del secreto de sumario, aunque ha adaptado su versión al contenido del sumario.
En declaraciones a los medios a la salida del juzgado, el abogado de Porto, José Luis Gutiérrez Aranguren, ha dicho que «sí» ha mantenido su versión inicial en la que defendía su inocencia, mientras que fuentes consultadas por Europa Press han puntualizado que la madre de Asunta ha variado su versión adaptándola al contenido del sumario. Además, las mismas fuentes han asegurado que no ha declarado contra su exmarido.
Según ha explicado la defensa de Rosario Porto, en la declaración ante el juez José Antonio Vázquez Taín «se repasó absolutamente todo del día de los hechos e incluso de tiempo antes». «Se habló de casi toda la vida de ella«, ha afirmado.
Aranguren ha señalado que en su comparecencia en el juzgado, la madre de Asunta «mantuvo una postura muy coherente, razonada y razonable». Además, según ha agregado, Rosario Porto ha dado explicaciones «a todo, excepto a cuestiones que no tenían nada que ver con el tema» y que a juicio del abogado, «parecía que intentaban alimentar el morbo».
De hecho, tal y como manifestó Aranguren, él mismo fue el que recomendó a su defendida que no contestase a varias preguntas. Según las fuentes consultadas por Europa Press, Rosario Porto no respondió a las cuestiones planteadas por la Asociación Clara Campoamor, que se personó como acción popular.
Preguntado acerca de si se hizo referencia al suministro de «polvos blancos» a la niña por parte del padre, como el juez recoge en el auto, Aranguren ha replicado que ese mismo auto dice que Rosario Porto es «la autora» y que él «discrepa» de ese contenido.
Así, ha atribuido el hecho de que apareciese esa referencia en el escrito judicial a «una interpretación» a las declaraciones de Rosario Porto. «Respeto los autos, pero mi interpretación es que hay explicaciones que están sacadas de contexto«, ha remarcado, antes de insistir en que él nunca ha dicho que ella hubiese hecho esas manifestaciones (recogidas en el auto).
Unas tres horas
Los dos furgones de la Guardia Civil procedentes de la cárcel de Teixeiro en Curtis, llegaron a las 16,00 horas para que los padres de Asunta compareciesen ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago. La declaración de Rosario Porto comenzó pasadas las 18,00 horas y se ha prolongado durante unas tres horas.
Mientras, sobre las 19,20 horas abandonó la sede judicial un furgón de la Guardia Civil con Alfonso Basterra, quien se acogió a su derecho a no declarar, como ya sucedió el 18 de octubre cuando aún no se había levantado el secreto de sumario.
Sobre este extremo, el abogado de Rosario Porto ha apuntado que «respeta profundamente su decisión». «Su letrada entendió que el escaso tiempo del que dispusimos para preparar este acto no le permitiría afrontarlo con las debidas garantías«, ha desvelado al respecto de Belén Hospido, que se encarga de defender a Alfonso Basterra.
De esta manera, el padre de la niña «no declarará mientras no conozca perfectamente el contenido de la causa«, según lo explicado por el abogado de la madre de la niña.
Antes se había negado a declarar
Porto se había negado a declarar ante la Guardia Civil tras haber sido detenida por su supuesta vinculación con el crimen de su hija adoptiva. Sin embargo, en su primera comparecencia ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago de Compostela dio un primera versión de los hechos durante unas tres horas y media.
La versión inicial sostenida por la madre era que la tarde del sábado 21 de septiembre dejó a Asunta en su domicilio haciendo los deberes y que cuando regresó a las 21.30 horas, ya no estaba y la puerta se encontraba cerrada con llave y la alarma conectada.
En la denuncia por desaparición que interpuso ante la Policía en Santiago a las 22.31 horas de ese sábado, Rosario P.O. indicó que cuando comprobó que su hija no estaba en casa, llamó a su exesposo que vive a escasos 25 metros, para comprobar si estaba con él. Tras esperar un tiempo prudencial, se pusieron en contacto con varios conocidos y amigos de la niña con resultado negativo.
Sin embargo, la versión inicial de la madre fue desmontada con el hallazgo de varias imágenes de cámaras de seguridad en las que puede verse a ella en su coche acompañada por su hija en dirección a Teo, en una franja horaria en la que según su testimonio, no estarían juntas.
Sobre la 1.30 horas del domingo 22 de septiembre, el cuerpo de la niña fue localizado en una pista forestal de Cacheiras a unos cuatros kilómetros de Montouto, donde la madre posee una casa que heredó de sus padres.
Levantamiento del secreto
Tras unos dos meses de investigación, en el auto de apertura del secreto de sumario, el juez instructor sostiene que el padre de la niña, el periodista Alfonso Basterra, fue quien le suministró «una dosis tóxica de orfidal» el día de su muerte y que Rosario Porto la asesinó «mediante asfixia mecánica». Asimismo, argumenta que «en connivencia» ambos son responsables de drogar durante un periodo «de al menos tres meses» a su hija.
Vázquez Taín considera que en base a los resultados de la autopsia y de análisis de toxicología, a Basterra se le imputa que, «al igual que había efectuado en episodios anteriores», el 21 de septiembre fue él quien suministro a Asunta la dosis de orfidal «para privarla de toda voluntad y defensa y presuntamente facilitar la acción de asfixia, en un plan concordado» con Rosario Porto.
Tras su detención, ésta es la tercera vez que los padres de Asunta son citados por el juez. En la segunda, el 18 de octubre, en la que se negaron a colaborar con la investigación hasta que se levantase el secreto de sumario, el fiscal, tras hacer un relato de los hechos, elevó la calificación del crimen a asesinato, al entender que existen las agravantes de alevosía y parentesco.
En esa ocasión, los padres de Asunta habían sido trasladados desde la prisión coruñesa de Teixeiro a los juzgados compostelanos, para participar en la comparecencia en la que el juez les comunicó que el procedimiento seguirá la Ley del Tribunal del Jurado, pero rechazaron colaborar hasta que fuera levantado el secreto de sumario, hecho que se produjo el pasado martes 19 de noviembre.
El juez instructor consideró en el auto por el que comunicaba el levantamiento del secreto de sumario, casi dos meses después del inicio de la instrucción, que era posible hacerlo «sin que se cause un grave perjuicio a la causa».
Además, el juzgado les ha facilitado a las partes copia en formato PDF del sumario «fiel reproducción de los folios de la misma«, pero les ha advertido de que el contenido es «realmente sensible» y, para evitar filtraciones, los documentos llevan una marca de agua distinta para cada parte.