Tohil Delgado, el secretario general del Sindicato de Estudiantes, no tiene tiempo de estudiar. Ya lo hacen los 20.000 estudiantes de Secundaria, Bachillerato, FP y universidad a los que dice que representa, pero sus obligaciones en el sindicato le impiden coger los libros. La comisión ejecutiva del sindicato admite abiertamente que su máximo representante no es estudiante desde hace cuatro años. Lo hace en su página web en un largo escrito en el explica que «el compañero Tohil, que es licenciado en Sociología, tiene un compromiso militante en defensa de la enseñanza pública desde hace tiempo… y desde que fue elegido secretario general él, junto a miles de afiliados, ha dedicado lo mejor de sus esfuerzos a la tarea de extender la organización e impulsar la movilización en defensa de la enseñanza pública… En los últimos cuatro años se ha dedicado a cumplir con las obligaciones para las que fue elegido democráticamente por sus compañeros y esto le ha llevado a interrumpir el estudio de otra carrera». La carrera interrumpida en la UNED de la que habla el sindicato es Antropología. Se matriculó sólo de una asignatura en el curso 2008-2009: Estructura Social, pero no se presentó al examen.
Lo que no explica el sindicato es por qué Tohil Delgado asegura que estudia en la UNED, como hizo recientemente a un grupo de periodistas, cuando hace cuatro años que dejó los libros. El Sindicato también niega que Delgado se haya embolsado 3.240 euros por acudir a las sesiones del Consejo Escolar del Estado en los años 2011 y 2012, lo mismo que cobra el resto de representantes de otras organizaciones educativas por acudir a estas reuniones. Es más, aclara que en 2011 recibió cero euros, entre otras cosas porque Tohil Delgado no acudió a ninguna de las reuniones a las que le convocaron a pesar de que el Consejo Escolar del Estado es el máximo órgano de representación y de participación de la comunidad educativa. En 2012 debió cambiar de opinión y reconsiderar su asistencia, ya que la organización estudiantil aclara que cobró «546,10 euros» ese año.
El hecho de que Tohil Delgado represente a los estudiantes sin serlo no ha sido bien visto por el Consejo de Estudiantes Universitarios del Estado (Ceune), el máximo órgano de representación de los estudiantes en España. Su vicepresidente, Gabriel Martín, ya anunció el miércoles que si se confirma que Delgado no está matriculado en ninguna universidad, «no le vamos a permitir que acuda al Consejo de Estudiantes, no le vamos a remitir las convocatorias para próximas reuniones». El representante de el Ceune también aseguró que le exigirá que pida disculpas al resto de compañeros». El representante de alumnos de la UNED, Fernando Pérez cree que Delgado «debería dimitir porque está en el sindicato por la defensa de intereses personales y políticos un no estudiante no puede representar a los alumnos».