Xosé María Benito Fontenla Leal (Ferrol-1864 –La Habana- 1919), intelectual galleguista.
Xosé María Benito fue un inquieto intelectual gallegista, presidente de la Unión Redencionista Gallega e impulsor da Real Academia Galega – siendo académico no numerario de esta misma institución-, también perteneció a la Masonería y adoptó el nombre masónico de Murguía.
José Fontenla Leal fue, junto con Murguía y Curros Enríquez, clave para la fundación de la Academia Galega en 1906. No obstante, su vida, entregada por completo a Galicia, no permaneció en la memoria colectiva al igual que otros personajes. Su figura es imprescindible para la construcción de Galicia como nación cultural.
Nacido en Ferrol
Xosé María Benito Fontenla Leal nació en Ferrol el 12 de febrero de 1864 en la casa familiar en la calle de la Estrella. Fue bautizado en la iglesia parroquial de San Julián. Emigró a Cuba junto con sus padres.
En La Habana trabajó en la industria litográfica. Fue una auténtico bibliófilo, llegando a reunir una biblioteca de más de tres mil volúmenes. La temática de estos libros estaba sobre todo relacionada con la historia, geografía, lengua, artes y tradiciones de Galicia. Fontela donó parte de esta biblioteca al Centro Gallego de La Habana y, tras su muerte, el resto fue donado por su único hijo a la Academia Galega.
En 1886 funda, junto a Secundino Cora García, la Revista de Galicia, publicación mensual bilingüe de corta duración. También fue colaborador del Diario de la Marina.
Centro gallego de La Habana
En enero de 1903 se hace socio del Centro Gallego de La Habana y durante varios años fue bibliotecario de la sección de instrucción. En 1917 fue comisionado por el Centro Gallego para acompañar a Galicia los restos mortales del músico José Castro «Chané». Fue presidente de la sociedad Unión Redencionista Gallega, encargada de apoyar el movimiento agrarista en Galicia. Como presidente de esta entidad Fontenla Leal firmó un manifiesto donde ponía de relevo su amor por Galicia. Escribía Fontenla:
“Non hai máis que analizar a grandes trazos a vida do pobo rural galego, de onde procede a inmensa maioría dos inmigrados que en Cuba vivimos, para condoérmonos da súa angustiosa situación e pór todo o noso empeño en aliviarlla, combatendo os seus males, xa que traballando por Galiza traballamos polo benestar dos nosos parentes e amigos e polo noso propio, a cuxo amoroso seo, ao fin e ao cabo, habemos ir recobrar as calorías perdidas no rudo e enervante traballo dos países tropicais (…) Conterráneos! Vinde a engrosar as nosas filas! O esforzo que se vos pide é máis ben de orde moral que material. É preciso constituír unha poboación tan formidábel que o eco da súa potente voz, vibrando como laúde dos nosos bardos épicos, na tribuna, no xornal e no folleto, repercuta nos lugares máis recónditos do país e fortaleza e pule dos nosos irmáns para loitar pola súa redención, que é o empeño máis grande, máis santo, máis sublime a que poden entregarse os galegos. Conterráneos, Viva Galiza redimida!”.
Academia Galega
Fontenla Leal tuvo una decisiva contribución en la fundación en 1905 de la Asociación Iniciadora y Protectora de la Academia Galega, junto con el poeta Manuel Curros Enríquez. Esta sociedad sería la génesis de la futura Real Academia Galega. Fontenla siguió siempre vinculado a esta sociedad, ocupando los puestos de vocal, vicepresidente y presidente. Fue también académico no numerario de la Real Academia Galega.
Tuvo uno destacada presencia en la formación de la sociedad «Ferrol y su Comarca» en la que fue el encargado de organizar su sección de propaganda en 1909.
Fontenla fue masón, pertenecía a la logia de Regla, del Gran Oriente Nacional de España Unión y Concordia nº 151, adoptando el nombre masónico de «Murguía».
Fontenla Leal murió en el hospital habanero Calixto García el 5 de diciembre de 1919. Sus dificultades económicas le privaron de su condición de socio del Centro Gallego y, por tanto, de la posibilidad de ingresar en el sanatorio La Benéfica. Quien había sido promotor de la Academia Galega y del himno de Galicia terminó soterrado en una fosa común del cementerio Colón de La Habana, necrópolis diseñada por el ferrolano Calixto Loira.
Himno galego
Desde Cuba, Fontenla Leal también tuvo una importante participación en la difusión del himno gallego. En efecto, Fontenla escribió en varias ocasiones a Eduardo Pondal y a Pascual Veiga instándolos a que le enviaran la letra y la música del himno, cuya composición se estrenaría en La Habana el 20 de diciembre de 1907. Fontenla tiene, por tanto, una intervención decisiva en la fijación de los símbolos nacionales de Galicia.
En diciembre de 2007 el Real Coro “Toxos e Froles” se desplazó a La Habana para organizar junto con las entidades gallegas allí residentes una serie de actos en recuerdo del centenario con especial dedicación a Fontenla Leal.
Homenajes
En los últimos años Fontenla Leal ha recibido una serie de homenajes , entre ellos del Toxos y del concello de Ferrol. En el año 1999 el Concello publicó una documentada biografía obra del profesor Xosé María Dobarro. En ese mismo año se inauguró un monumento a Fontenla en la plaza del Himno Gallego.
En Narón y Ferrol hay calles que llevan el nombre del ilustre galleguista.
En el Museo del Real Coro “Toxos e Froles” se encuentran depositadas varios objetos que pertenecieron a Xosé Fontenla y que fueron donados por la asociación “Ferrol y su Comarca”, entre ellos una gaita y una pandereta que el ferrolano tenía en su viejo domicilio habanero.