El Gobierno no descarta recurrir de nuevo al Fondo de Reserva de las pensiones, dotado actualmente con 66.000 millones de euros, para pagar a los pensionistas la nómina y la paga extra de diciembre.
El pasado mes de agosto, el Gobierno ya recurrió al Fondo de Prevención y Rehabilitación de las mutuas, del que tomó 4.400 millones para resolver también problemas de tesorería.
El Gobierno no descarta recurrir de nuevo al Fondo de Reserva de las pensiones, dotado actualmente con 66.000 millones de euros, para pagar a los pensionistas la nómina y la paga extra de diciembre.
Así al menos lo ha dado a entender el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, quien al ser preguntado por si se usará la ‘hucha’ de las pensiones para afrontar los pagos de diciembre a los pensionistas ha declarado que las reservas están «precisamente» para atender «ciclos económicos bajos» como el actual.
«En estos momentos nos enfrentamos a una situación económica complicada y el sistema está más que sobrado de mecanismos para garantizar el cobro puntual de las pensiones. Si tiene que ser mediante el Fondo de Reserva, no hay ningún problema. Está para eso», ha dicho.
En declaraciones a los periodistas durante unas jornadas organizadas por Inverco con motivo del 25 aniversario de la Ley de Planes y Fondos de Pensiones, Burgos ha insistido en que el Gobierno siempre ha mantenido que las reservas están para afrontar situaciones económicas complicadas como la que la sociedad española vive actualmente.
«Lo importante es poner de manifiesto la existencia de reservas en los sistemas públicos de pensiones y, en el caso de nuestro sistema público, estas reservas superan los 66.000 millones de euros«, ha subrayado.
A finales de septiembre, el Ejecutivo anunció que, por primera vez, iba a recurrir al Fondo de Reserva para disponer 3.063 millones de euros, dinero que se dirigía con carácter exclusivo a la financiación de las pensiones de carácter contributivo y demás gastos necesarios para su gestión.
El pasado mes de agosto, el Gobierno ya recurrió al Fondo de Prevención y Rehabilitación de las mutuas, del que tomó 4.400 millones para resolver también problemas de tesorería de la Seguridad Social.