El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, compareció a primeras horas de la tarde de este jueves 6 de mayo, a tres días de que finalice el Estado de alarma en nuestro país, y después de la reunión del Consello Interterritorial de Saúde y del Comité Clínico.
Recordó que la Xunta de Galicia lleva meses pidiendo una legislación específica para poder afrontar la situación que se dará a partir del 9 de mayo, con el fin del Estado de alarma. Cree el regidor autonómico que en los próximos meses «se afrontará el mismo riesgo pero con menos herramientas para combatir el virus, aunque con más esperanzas ante el avance de la vacunación».
También argumentó que el nuevo contexto jurídico que propone el Gobierno central «nos retrotrae al principio de la pandemia…. esto supone gestionar la pandemia como en el inicio como si no se hubiese aprendido nada”, declaró Núñez Feijóo. No comparten la nueva hoja de ruta del Gobierno pero aseguran que «la Xunta se volverá a adaptar».
NUEVAS NORMAS
Así el presidente de la Xunta de Galicia anunció que se elimina el toque de queda y la comunidad se abre a los viajeros eliminando el confinamiento perimetral. Estas normas entrarán en vigor en la medianoche del sábado 8 al domingo 9 de mayo.
La única excepción en la que la Xunta pretende mantener el toque de queda y el cierre municipal a nivel interno serán los cinco municipios de la comunidad que se encuentran en un nivel epidemiológico de riesgo «extremo». Al decaer el estado de alarma, Feijóo ha remarcado que el Ejecutivo se verá obligado a pedir la autorización judicial para estas decisiones.
En cuanto al cierre perimetral, Feijóo ha confesado que es una de las cuestiones que más preocupan a lo expertos y ha anticipado que se reforzará el registro de viajeros.
Para la hostelería, ha concretado que los bares se abrirán hasta las 23,00 horas y los restaurantes hasta las 1,00 horas. Además, ha anticipado que habrá avances en lo que respecta a la circulación y a la reunión en el exterior dentro de Galicia.
Hasta ahora, en Galicia había cuatro niveles de restricciones activos. El de máximas restricciones supone la prohibición de reuniones al margen de las personas convivientes, hostelería cerrada salvo servicio de recogida y para llevar y cierre del perímetro municipal.
El resto de Galicia tenía movilidad entre todos los ayuntamientos y las principales diferencias radican en el número de convivientes y los aforos de la hostelería, abierta hasta este momento hasta las 23 horas en el caso de los restaurantes con licencia para servir cenas y hasta las 21,00 horas para el resto.
Con estos parámetros comunes, en el nivel de restricciones alto, la hostelería solo podía servir hasta ahora en las terrazas, al 50 por ciento, y las reuniones estaban limitadas a cuatro personas.
En el nivel medio alto, la hostelería tenía permitido abrir en las terrazas al 50 por ciento y en interior al 30 por ciento, con reuniones de seis personas en exterior y cuatro en interior. Mientras, en el nivel medio bajo, el aforo de los locales de hostelería era del 75 por ciento en terrazas y del 50 por ciento en interior, con el mismo número de personas permitidas por grupo.