Sobre las once de la noche de este viernes saltaron todas las alarmas ante la posibilidad de que una residente en las conocidas como «Viviendas de Bazán», en Caranza, pudiera haber fallecido puesto que no se sabía nada de ella desde hacía días y los vecinos notaban un mal olor procedente del segundo piso de la vivienda, en el número 3, de la calle D.
Acudieron al lugar efectivos de las Policías Local y Nacional y el médico forense encontrando en el interior del piso el cadáver, en muy mal estado, de M.T.C. de 89 años de edad, cumplía los 90 el próximo día 12 de septiembre.
Tras ordenarse el levantamiento del cadáver fue trasladado en un furgón judicial al tanatorio del Hospital «Juan Cardona» en donde se le practicó la autopsia en la mañana de este sábado y las pruebas necesarias para el reconocimiento del cadáver, dado su estado de putrefacción.