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La fragata «Almirante Juan de Borbón» unidad española, que se encuentra integrada en el Standing Naval Maritime Group 2 (SNMG-2) de la OTAN, acababa de finalizar las maniobras internacionales “Sea Breeze” y recaló unos días en el puerto más grande de Rumanía, en Constanza para descanso de su dotación y planear los siguientes ejercicios con unidades de Rumanía y Bulgaria, abandonando dicho puesto rumbo al mar Negro en la jornada de este lunes, dia 15
La fragata de la Armada Española “Almirante Juan de Borbón”, que se encontraba atracada en el puerto de Constanza, recibió a bordo la visita del Embajador de España en Rumania, Ramiro Fernández-Bachiller, acompañado de su esposa y de varios miembros de la Embajada de España en Bucarest.
El Embajador fue recibido con los honores de ordenanza correspondientes.
Tras saludar al personal allí formado, el Embajador acudió a la cámara de Oficiales para firmar en el libro de honor. A continuación se dirigieron a la sala de conferencias donde se le expuso la misión asignada al buque durante su integración en el SNMG-2 y una presentación con el resumen de las capacidades con las que cuenta el barco.
Recepción a bordo
Al día siguiente, se llevo a cabo a bordo de la fragata española una recepción a la que asistieron el Embajador español, la Sra. Embajadora de Canadá en Rumanía, el Almirante Jefe de la Armada en Rumanía y otras autoridades civiles y militares.
La fragata “Almirante Juan de Borbón” se encuentra integrada en al SNMG-2 (Agrupación Naval permanente de la OTAN), junto con otras unidades de los países de la Alianza desde el pasado día 6 se septiembre.
La participación en estas agrupaciones de la OTAN contribuye a fortalecer el compromiso de España con la paz y seguridad internacionales.
La recalada en Constanza supuso unos días de descanso para la dotación, que también se aprovechó para tareas de mantenimiento y logísticas del buque, tras haber participado en los ejercicios “Sea Breeze” en el Mar Negro junto con los otros buques de la agrupación y otras unidades navales de Ucrania, Rumania, Turquía y Estados Unidos.
Durante estas maniobras se ha realizado diferentes ejercicios para comprobar la interoperabilidad entre los diferentes sistemas y procedimientos empleados por cada uno de ellos. También ha supuesto una oportunidad única para incrementar el adiestramiento de las dotaciones de los buques, que se completará con los nuevos ejercicios previstos para los próximos días en la misma zona con unidades de Rumanía y Bulgaria.
De nuevo al Mar Negro
Según se señala en el «diario de a bordo» «Ahora navegamos junto con los compañeros canadienses y rumanos, por aguas del Mar Negro y comenzamos otro periodo de ejercicios junto con varias unidades aéreas y navales del las Fuerzas Armadas de Rumania y de Bulgaria.
Prometen ser interesantes y provechosas, por lo menos en aquellos ejercicios donde tengamos la oportunidad de tratar directamente con su gente y donde podamos intercambiar opiniones y formas de trabajar entre ambos países. Esto supone, sin lugar a duda, completar nuestro adiestramiento en todos los sentidos.
El tiempo sigue siendo bueno. Hemos tenido un poco de viento de levante que bajaba la temperatura lo suficiente como para pasear con pantalones cortos y dejar aparcado el jersey. Ya vendrán puertos donde el frío tome su protagonismo pero, por ahora, vamos a disfrutar del mes de septiembre por el Mar Negro que está siendo todo un privilegio para la todos.»
