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Se ha producido en España un aumento del ingreso en prisión de personas procedentes de otros países, que ya suponen el 33,6%.
El aumento de los reclusos extranjeros ha especializado, en nuevas enfermedades, a los médicos que trabajan en las prisiones.
Así lo ha puesto de manifiesto la Sociedad Epañola de Sanidad Penitenciaria (SESP) durante el I Congreso Internacional de esta Sociedad, que se celebra en Madrid del 15 al 17 de noviembre y en el que participan cerca de quinientos profesionales sanitarios de distintos países.
Según ha explicado la médico del cuerpo facultativo de Sanidad Penitenciaria y vicepresidenta del Comité Organizador, Remedios Moreno, los principales países de procedencia de los reclusos inmigrantes son de Latinoamérica (Ecuador, Colombia y República Dominicana), del Norte de África (Marruecos) y de países del Este (Rumanía).
En una nota de prensa, la SESP ha explicado que el aumento del número de internos procedentes del extranjero ha provocado un cambio en el perfil sanitario de los reclusos de las prisiones españolas.
La doctora Moreno ha señalado que actualmente se tratan menos enfermedades infecciosas relacionadas con el consumo de drogas que hace quince o veinte años y se tratan más otro tipo de infecciones e incluso patologías como el estrés postraumático.
Los nuevos reclusos hacen que los profesionales médicos que trabajan en las prisiones españoles se hayan ido formando y especializando en las nuevas enfermedades infecciosas de los presos hasta conseguir que el sistema penitenciario español sea un modelo a seguir por otros países, según la SESP.
Entre los nuevos programas puestos en marcha en las prisiones españolas destacan el intercambio de jeringuillas, la distribución anónima de preservativos y lubricantes o el programa de mantenimiento con metadona.
Además, durante el Congreso, el presidente del Comité Organizador, el doctor Fabio Sternberg ha puntualizado que en las prisiones españolas se llevan a cabo intervenciones sanitarias con un elevado grado de efectividad relacionadas con la promoción de la salud y la prevención y control de enfermedades. ha asegurado que España «tiene mucho que enseñar a los países latinoamericanos» en materia de salud.
La SESP ha añadido que Instituciones Penitenciarias ha implantado en España un sistema sanitario sostenible como la única garantía de que las personas en prisión tengan acceso a la atención sanitaria y que a su salida en libertad se encuentren en igualdad de condiciones que el resto de la población.
«España puede y debe liderar la sanidad penitenciaria en Latinoamérica, ya que es un claro ejemplo de buenas prácticas y estos países pueden tomarlo como ejemplo», ha concluido Sternberg.
