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Los restos mortales del almirante ferrolano Salvador Moreno Fernández, que hasta hace unos días se encontraban en el Panteón de Marinos Ilustres, ubicado en la localidad gaditana de San Fernando, concretamente en el interior del recinto militar de San Carlos, junto a la Escuela de Suboficiales de la Armada, han sido exhumados en la mañana de este sábado día 3 de agosto, tras petición previa de familiares y herederos del propio almirante.
Posteriormente, los restos mortales del almirante les han sido entregados a los familiares en una ceremonia calificada como “íntima” y a la que solo han acudido familiares y amigos a título personal e individual
Por acuerdo de la familia los restos descansarán finalmente en el panteón familiar del cementerio municipal de Catabois, en su ciudad natal, en un acto de carácter íntimo.
Los restos mortales del almirante Salvador Moreno habían sido trasladados al Panteón de Marinos Ilustres el 7 de junio de 1973.
Salvador Moreno Fernández
Nació en Ferrol el 14 de octubre de 1886. Fueron sus padres Salvador Moreno y de Eliza, teniente de navío de segunda clase que llegó a alcanzar el grado de vicealmirante, y de María Asunción Fernández y Antón.
El 9 de febrero de 1903 ingresó en la Armada después de los estudios de su carrera por un tiempo de dos años de aspirante a bordo de la fragata Asturias, por aquel entonces Escuela Naval Flotante y cuatro de guardiamarina en buques de la Escuadra. Salió con la graduación de alférez de navío
A lo largo de su carrera desempeñó diversos puestos, Gentilhombre de cámara con ejercicio del rey Alfonso XIII desde 1927, como jefe del Polígono de tiro Janer y jefe de la Base Naval de Ríos en Vigo,
En 1933, ya como capitán de fragata, se le otorgó el mando del buque-escuela “Juan Sebastián de Elcano” con el que realizó un crucero atípico, comenzando el 15 de julio y terminando el 15 de agosto solo un mes de duración. Fue el viaje más corto que ha realizado este buque. Posteriormente el buque realizo un nuevo crucero de instrucción, del 15 de septiembre de 1933 al 31 de mayo de 1934, finalizando en Ferrol.
Intervino a bordo de buques en la guerra civil española, entre ellos el “Almirante Cervera” y el «Canarias«, siendo condecorado con la Medalla Naval y la Cruz Laureada de segunda clase de la R.y M. Orden de San Fernando.
Al término de la guerra fue nombrado ministro de Marina cargo que ocupó hasta 1946. Dejó el ministerio y fue nombrado comandante general de la Flota con el grado de vicealmirante. En 1950 fue ascendido a almirante y pasó al mando de la Capitanía General de la Zona Marítima del Cantábrico, en Ferrol, cargo que abandonó para ser nombrado de nuevo ministro de Marina permaneciendo en el cargo del 1951 a 1957.
En 1951 le fue concedida la gran cruz del Mérito Aeronáutico.
Cuando pasó a la reserva fue elegido presidente del consejo de administración de la compañía Trasmediterránea cargo en el que permaneció hasta su fallecimiento, en Madrid, el 2 de mayo de 1966
