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El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, analizó esta mañana el estudio sobre el corredor atlántico presentado ayer por el Consejo Económico y Social y el Eixo Atlántico. El capítulo que este documento le dedica a la conexión ferroviaria de Ferrol cuantifica, según explicó el regidor, en un total de 730 millones de euros la inversión necesaria para que el tendido se adapte a los requisitos marcados por la Unión Europea en cuanto al transporte de mercancías. “Ya hay un estudio de necesidades. Ahora vamos a solicitar a la Xunta y al Gobierno central que Ferrol esté ligado al corredor atlántico de mercancías”, aseguró.
Mato recordó que hace un año, en octubre del 2020, acordó con el Eixo Atlántico la inclusión de Ferrol en el citado estudio, cuando se encontraba en fase de elaboración, y que dos meses después el pleno de la corporación aprobó una declaración institucional en la que también reclamaba la inclusión del puerto en el trazado del corredor atlántico. También en la Asamblea del Eixo celebrada el pasado febrero se trató este asunto. La parte dedicada a Ferrol constata la creciente importancia del puerto en un contexto de dificultad debido al descenso de movimientos de ciertas mercancías, pero hace notar el tráfico de contenedores como una fortaleza de cara al futuro. Una vez que la conexión ferroviaria de la dársena exterior “ya está muy avanzada”, el siguiente paso debe ser que la que une la ciudad con el eje atlántico también responda a las necesidades de una comarca con un tejido empresarial e industrial que, a su vez, precisa de un ferrocarril moderno para desarrollar sus potencialidades.
En la actualidad, Ferrol está conectado con A Coruña a través de dos tramos que suman 68,9 kilómetros y tienen más de un siglo. El primero, de 42,8, va hasta Betanzos-Infesta, y el segundo, de 26,1, hasta A Coruña. En más de la mitad de estos trayectos las velocidades son muy bajas, con promedios inferiores a 75 kilómetros por hora. El alcalde recordó estos datos para indicar que los pasos que desde el año 2000 se dieron para tratar de mejorar estas infraestructuras “no dieron fruto” y que la última noticia oficial es una respuesta parlamentaria del 2013, en la que el Gobierno, “entonces del Partido Popular”, dijo que “la viabilidad económica del proyecto no estaba confirmada”.
El estudio del Eixo Atlántico, elaborado por el catedrático del área de Ingeniería e Infraestructura de los Transportes de la UDC Miguel Rodríguez Bugarín, “uno de los mayores expertos que tenemos sobre el ferrocarril”, propone una línea de tráfico mixto, tal y como el propio alcalde viene reclamando. También incluye necesidades como la electrificación del trazado y la instalación del sistema de seguridad ERTMS, además de un ancho de vía igual al del corredor A Coruña-Vigo. La intención es que soporte el paso de convoyes de mercancías de hasta 750 metros de longitud, cuando en la actualidad entre Ferrol y Betanzos solo pueden circular los de hasta 280 metros (longitud máxima básica) o de hasta 500 (longitud máxima especial).
En cuanto a las modificaciones del trazado actual, se abordan por separado. Por una parte, a partir de Betanzos se opta por la comunicación directa con el corredor atlántico a través de Uxes, sin pasar por A Coruña. Para el tramo más próximo al entorno protegido de la ría de Betanzos se proponen mantener el corredor actual para evitar aficiones.
En la estimación de costes se detallan 250 millones de euros para el tramo entre Uxes y la estación de Betanzos-Ciudad (21 kilómetros), 60 millones para adaptar 5,8 kilómetros de línea en la zona de Betanzos y 420 millones para actuar sobre 26 kilómetros de tendido hasta Ferrol. En total, 730 millones de euros para conseguir “una línea que sea operativa para mercancías y viajeros” conforme a los requerimientos actuales.
