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Los clubes que hacen uso de las instalaciones deportivas municipales disponen desde esta semana de un nuevo protocolo de actuación acomodado a la situación de “nueva normalidad”, lo que supone medidas menos restrictivas y adecuadas a la normativa y a las recomendaciones de las autoridades sanitarias para la situación actual. El concejal de Deportes, Antonio Golpe, firmó el pasado martes un documento que contempla que podrá ser modificado según la evolución de la situación epidemiológica y en función del que establezcan tanto las Administraciones autonómica y estatal.
Entre otras muchas medidas, el protocolo, que están recibiendo todas las entidades, incluye la obligatoria identificación de cada uno de los deportistas que accedan a los recintos, la desinfección de manos y calzado, el empleo de máscara protectora y el respeto a los circuitos de movilidad indicados en la instalación. Además, los entrenadores o responsables de cada grupo deberán velar por el cumplimiento de todas las normas, incluidos los horarios. En el caso de niños, deben estar acompañados por personal de la entidad, que se encargará de supervisar que observan todas las medidas higiénicas. Excepcionalmente, las madres y los padres podrán acceder con los menores al vestuario infantil de la piscina de Caranza, más se trata de un único caso, ya que los acompañantes tendrán prohibida la entrada en el resto de instalaciones.
Este protocolo sustituye al establecido para la fase 3 de la desescalada, que entró en vigor el pasado 8 de julio, con el paso de Galicia a dicho período de vuelta a la nueva normalidad. Aquel documento, pese la que era mucho más restrictivo que el actual, recogía por primera vez desde el inicio del estado de alarma a posibilidad de llevar a cabo entrenamientos en grupo. Durante la fase 2 estuvieron limitados únicamente a los individuales, por lo que la mayoría de los clubes decidieron no usar las instalaciones municipales pese la que ya estaban abiertas.
