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Lamentar el fallecimiento este viernes, en Madrid, del Almirante ferrolano Jose Poblaciones Porta.
Nacido el 5 de mayo del 1938, estudió el bachillerato en el Instituto «Concepción Arenal«, ingresó en agosto de 1956 en la Escuela Naval Militar, perteneciendo a la Promoción 361 formada por 42 componentes, y en la que se integraron, entre otros, los almirantes ferrolanos Francisco Rapallo o Francisco Torrente, o los CC. de NN. Juan de Pazos Lozano, Santiago Estevan o Ricardo Dolarea..
Con un brillante historial profesional residia en Madrid, frecuentando en diferentes ocasiones su ciudad natal.
Desempeñó entre otros puestos el de presidente del Consejo Directivo del Servicio de la Seguridad Social de la Armada.
Poseía diversas condecoraciones, entre ellas Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil, la Gran Cruz del Mérito naval y la Gran Cruz del Mérito Aeronáutico, con distintivo blanco
Desde Galicia Ártabra enviamos nuestro más sentido pésame a sus familiares y compañeros de la Armada.
A veces los tópicos ensombrecen la sinceridad de la pena ante la pérdida de un buen amigo. El almirante Poblaciones defendió los intereses de España en la OTAN durante muchos años y desde diversos puestos, siendo el último, el de Representante Militar ante el Comité Militar (MILREP) de dicha organización, en el C.G. de Bruselas. Siempre mostró ante superiores y subordinados, su compañerismo, su simpatía, su dedicación y una especie de alegría «contagiosa». Submarinista devoto y brillante comandante de destructor, deja, además de a su viuda y numerosa prole, desconsolados a cantidad ingente de amigos que lo queríamos y apreciábamos. RIP
Muchas gracias Pepe por tus cariñosas palabras. El dolor se lleva mejor viendo las muestras de cariño de tanta gente que le quería. Te mandamos un fuerte abrazo.
Familia Poblaciones
Gran dolor y sincero pesar al leer tan triste noticia. Todos los veranos te encontrabas con un Pepín sonriente y moreno por la playa de Doniños, paseando y bañándose. El Almirante se ha rendido ante el único Señor y, sin duda, cumplida sobradamente su misión en la tierra, las brisas serenas los habrán subido al Cielo. Que descanse en paz y un fuerte abrazo y sentido pésame a toda su familia.