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El pueblo de Ferrol respondió y abarrotó las naves de la S.I. Concatedral de San Julian para recibir al nuevo pastor diocesano Luís Ángel de las Heras que en la tarde de ayer fue ordenado obispo y tomó la responsabilidad de la diócesis de Mondoñedo-Ferrol.
Eran las cinco de la tarde cuando el nuevo obispo, acompañado por el hasta este sábado administrador diocesano Antonio Rodríguez Basanta llegaba a las puertas de la concatedral. Sonaban los acordes de gaita de la marcha Solemne del Antiguo Reino de Galicia a cargo de dos miembros del Real Coro «Toxos e Froles».
Fue recibido el párroco de San Julián y ecónomo diocesano, Ramón Otero, junto a miembros del consejo diocesano de consultores, el vicario general de los Padres Claretianos, el vicario castrense, y numerosos sacerdotes, sobre el medio centenar, diocesanos, castrenses y religiosos, entre ellos una amplia representaciones de los Misioneros Claretianos Hijos del Corazón de María.
Tras besar el «Lignum Crucis» se organizó una procesión hasta el interior del templo en el que se encontraban numerosos fieles y entre ellos miembros de distintas congregaciones de monjas residentes en la ciudad, la Junta General de Cofradías y numerosos cofrades, y diversas representaciones de la vida religiosa, social y cultural de la ciudad. Es de destacar que para este acto, considerado no oficial, no se enviaron invitaciones para el mismo.
Destacar el magnífico trabajo desarrollado, al igual que el sábado en Mondoñedo, por la Coral Polifónica del Casino Ferrolano bajo la dirección del maestro Pedro V. Pina Requena.
«SIÉNTASE COMO EN SU CASA, QUE LO ESTÁ
Ya en el altar mayor y antes de comenzar el acto religioso Antonio Rodríguez Basanta dirigió en nombre de los fieles unas palabras de saludo en las que señaló que «Le damos la bievenida a Ferrol y a Ferrolterra y concretamente a esta iglesia concatedral de San Julián. Siéntase en su casa, que lo está. Poco a poco como decia ayer en Mondoñédo nos ira conociendo y también le iremos conociendo y también poco a poco ira tomando conciencia de las situaciones personales y familiares, tanto para bien porque somos un pueblo que lucha cada día por el pan, como también aquellas dificultades serias que vamos arrastrando desde hace bastante tiempo y me refiero especialmente a esas situaciones de tantas familias, de tantos hombres y mujeres sin trabajo que necesitan lógicamente salir adelante. Poco a poco nos ira conociendo e ira tomando conciencia y siendo solidario con esta situación, difícil muchas veces».
«UN DÍA FELIZ, UN DÍA DE FIESTA
«Lo importante en este momento es que tenemos ya pastor, oramos por él, fue un tiempo largo en el que oramos también para que al que viniese el Espíritu del Señor lo guiase, lo fortaleciese…y resulta que ya lo tenemos, que ya está con nosotros. Es por lo tanto este domingo, al día siguiente del inicio de su ministerio episcopal, aquí en Ferrol un día feliz, es un día de fiesta.
Estamos con usted, los sacerdotes, los consagrados y este pueblo aquí reunido, casi me atrevo a decir que hay tanta gente como en Mondoñedo, lo cual es muy grato y de agradecer.
A todos muchas gracias por acoger a nuestro pastor y también por celebrar hoy en el domingo Día del Señor su segunda jornada del inicio de su ministerio episcopal».
Finalmente agradeció a la Coral Polifónica su ayuda a la celebración de la toma de posesión en Mondoñedo y a la visita del obispo a Ferrol.
Para terminar con «Cuando falta el obispo lo notamos en falta, cuando viene nos alegramos y lo celebramos así de esta manera tan numerosa en la concurrencia. Muchas gracias y de nuevo bienvenido».
«EXPRESIÓN DE FE
El nuevo obispo pronunció seguidamente unas breves palabras como respuesta en las que señaló que «Esta es una expresión de fe que me llega al corazón, vuestra compañía, vuestra acogida, vuestro entusiasmo y vuestra alegría. Espero poder cumplir con vuestra ayuda el plan de Dios sobre esta Iglesia de Mondoñedo-Ferrol en este lugar de Ferrol y Ferrolterra y que sea yo el instrumento del Señor para animar con todos vosotros este proyecto aquí. Os pido que el corazón se alegre en todo momento».
A continuación se celebró una Eucaristia en la que la homilía del nuevo obispo se centró en la festividad de la jornada, la fiesta de la Ascensión del Señor y en el año de la Misericordia.
Finalizado el acto religioso Luís Ángel de las Heras tuvo unas palabras de agradecimiento a todos los asistentes, pidió que rezasen por él y por el Papa y mostró su deseo de conocer la diócesis y de trabajar muy especialmente por los sectores marginados, por las familias con problemas y por la educación.
Por último tras saludar a todos los sacerdotes que lo acompañaron en el acto religioso descendió el altar y durante más de media hora fue recibiendo a todos los asistentes al acto que desearon saludarlo.
Asimismo mantuvo un primer contacto con el presidente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa, César Carreño.
