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La Dirección General de Tráfico (DGT) desarrolla desde este lunes y hasta el próximo día 3 de marzo una campaña especial de vigilancia y control del transporte escolar y de menores. En ella, los agentes comprobarán que tanto autobuses como conductores cumplan con la normativa establecida en la materia, que incluye, entre otras obligaciones, la necesidad de que los menores vayan acompañados por una persona debidamente cualificada en los desplazamientos.
En un comunicado, la DGT ha explicado que aunque estas inspecciones se realizan de forma rutinaria durante todo el curso, en los próximos días se intensificarán los controles de este tipo de transporte en las carreteras gallegas.
De este modo, se realizarán controles de carácter administrativo sobre las autorizaciones y documentos que deben tener dichos vehículos para la correcta prestación del servicio. También se verificarán que las condiciones técnicas y elementos de seguridad del vehículo son los que exige la normativa, así como los requisitos especiales que debe cumplir el propio conductor, como el permiso de conducción, los tiempos de conducción y descanso.
Entre las condiciones de seguridad que deben cumplir todos los transportes escolares y además de la existencia del acompañante que ya hemos indicado, se estipula la antigüedad máxima de los vehículos destinados a este tipo de pasajeros, el seguro de responsabilidad civil ilimitado o la obligatoriedad de llevar la señal de transporte escolar, entre otros, ha detallado la Dirección General de Tráfico.
Resultados de la última campaña
Según ha recordado Tráfico, la que se inicia este lunes es la segunda campaña de control de transporte escolar que se lleva a cabo durante en el primer trimestre del presente curso 2012-2013. La DGT efectuó una campaña análoga desde el 12 al 18 de noviembre de 2012 en las carreteras gallegas.
En esos días, la Guardia Civil de Trafico controló los vehículos dedicados a este transporte especial, siendo denunciados 138 por diversas causas. Las inspecciones conllevaron la formulación de 222 denuncias, de las que la mayoría (90) se relacionaron con la ausencia o irregularidades en la obligatoria autorización especial para este transporte. Sólo una denuncia se relacionó con alcoholemia positiva y otra con exceso de velocidad.
