La Xunta destaca la travesía marítima «Camiño de Santiago a vela». Tendrán «paradas» en Cedeira y Ferrol

La delegada territorial de la Xunta en Ferrol, Martina Aneiros, y las ediles  del concello de Ferrol, María del Carmen García Fraga y Elvira Miramontes Mas, participaron en la tarde de este lunes en Gijón, en la firma del protocolo de hermandad de las localidades en las que recala la iniciativa turística «Camino de Santiago a vela«, una travesía marítima impulsada por la asociación Northmarinas desde hace diez años que cuenta con el apoyo de la Xunta de Galicia.

Allí Martina Aneiros  destacó la huella que este itinerario deja en los que se animan a completarla y que supone “un impulso al modelo de turismo sostenible y desestacionalizado que promovemos desde la Xunta”, dijo. Tal y como explicó Martina Aneiros, el protocolo de colaboración tiene por objetivo fortalecer la cooperación entre las cerca de una veintena de localidades en las que recala esta travesía, entre las que se encuentran los municipios de Ferrol y Cedeira, y promover el crecimiento del sector náutico a través desarrollo de actividades socioculturales, turísticas y deportivas vinculadas con el mar y los puertos, especialmente los de la zona norte de España.

La firma del protocolo se hizo coincidir con una de las etapas de descanso de esta travesía internacional que partió a comienzos de mes desde La Rochelle, en Francia, navegando por toda la costa norte de España desde Hondarribia, pasando por las localidades de Getaria, Bermeo, Bilbao, Santander o Ribadesella. Tendrá una duración de 27 días, repartidos en 17 etapas de navegación y 10 jornadas de descanso. La última etapa hasta Santiago de Compostela se realizará a pie.

EL CAMINO POR LA MAR

Esta ruta hasta Galicia dura casi un mes, pues será el 1 de julio cuando el destino de Santiago de Compostela sea conquistado por los tripulantes, tras esos últimos pasos caminando. Durante el viaje, hay participantes que se van descolgando y otros que se van incorporando. Además, está la opción de acudir con la embarcación propia o de alquilar una con patrón incluido, incluso. Hondarribia, Getaria, Bermeo, Getxo, Santander, Ribadesella, Gijón, Avilés, Ribadeo, Viveiro, Cedeira, Ferrol, A Coruña, Laxe, Muxía, Muros, Boiro y Vilagarcía de Arousa son las escalas para este verano de este trayecto inolvidable. Y en cada una de ellas, se van sellando las credenciales para conseguir la Compostela. Y, al igual que en el camino por tierra, brotan –y seguro que echan amarras– las amistades, la camaradería, las confesiones, la diversión… Porque no todo es navegar. Las etapas suelen durar unas seis horas en la mar durante las mañanas, y luego, en cada sitio, hay actividades programadas, celebraciones, concursos gastronómicos, visitas culturales.

La flotilla está integrada por Juan Cruz y Marimar, por otros dos matrimonios vascos –y un tercero que ya no continúa– y por una gran mayoría de franceses. Pero a lo largo de la ruta, se van sumando italianos, belgas, alemanes, irlandeses, británicos, argentinos y hasta un brasileño. La previsión es acabar en Vilagarcía de Arousa con 32 embarcaciones. De hecho, como explica Patricia Alcubilla, coordinadora de la travesía, el objetivo de este proyecto es “movilizar la flota, atraer turismo náutico europeo y llenar nuestros puertos, porque hay 6.000 amarres vacíos en el norte”. Esta es la décima edición del Camino a Santiago a vela, por el que han pasado 2.000 peregrinos de la mar. 

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