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Con el objetivo de seguir preservando el edificio del Concello de Ortigueira, parte del patrimonio arquitectónico del municipio y uno de los espacios públicos más utilizados por la población ortegana, el Concello dedicará 41.914 euros para reparar la cubierta y fachada del salón de plenos.
El presupuesto será financiado con cargo al Plan Único de la Diputación de A Coruña y permitirá renovar la cubierta con la sustitución de las tejas de los cuatro faldones sobre el salón de plenos. Así pues, se levantará toda la teja existente y se reutilizará aproximadamente un 50% con el objetivo de no alterar la estética del edificio.
También se instalarán nuevos canalones y bajantes en la zona. En cuanto a las fachadas, se propone actuar en el acabado de las zonas deterioradas con enfoscado y enlucido de mortero de cal y acabado con pintura mineral al silicato en color blanco.
Los trabajos permitirán acondicionar un espacio que actualmente cuenta con deficiencias que pueden ocasionar goteras y humedades, así como desprendimientos de elementos sueltos.
“As tarefas redundarán no benestar da veciñanza, xa que o edificio do Concello é un dos lugares públicos máis empregados porque presta un importante e necesario labor social a toda a comunidade, ademais de ser un dos emblemas do noso municipio e de contar nas súas instalación co Teatro da Beneficencia e salas de exposición para exhibir diferentes mostras”, señaló el alcalde del municipio, Juan Penabad Muras.
La Casa Consistorial, que data del 1776, fue un convento y albergó a lo largo de su vida una cárcel pública, un Cuartel de la Milicia Nacional, una Escuela Pública y la sede de las oficinas municipales, con las que sigue contando hoy, además del teatro da Beneficencia y diversos espacios empleados como salas de exposiciones y escenario para eventos culturales.
“Teño a responsabilidade de coidar o patrimonio de todos os veciños, sei que eles necesitan sentir que hai unha man preocupándose polo cuidado de todo. Hai que facer obra nova pero neste Concello hai moito que se cae, e os cartos teñen que ir para aí moitas veces nin se ven. O exemplo é a biblioteca, máis de 300.000 nunha obra de menos de 20 anos. O Concello, a piscina, os centros sociais, o colexio, o mercado”, destacó Penabad Muras.
