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El Concello de Ares presentó a lo largo del sábado 16 de octubre los contenidos histórico-artísticos relacionados con la desaparecida portada gótica del Monasterio de Santa Catalina. La capilla del cenobio fue el espacio donde las historiadoras María Luz Ríos y Dolores Fraga, además de los arquitectos Mario Creciente y Rubén Santiago, expusieron las conclusiones y resultados de una investigación transversal, a caballo entre el campo arquitectónico y el histórico.
El acto, presidido por la concejala de Cultura, Alma Barrón, y con la presencia de Lucía Blanco, edil de Turismo, sirvió para mostrar al público asistente tanto las reflexiones del estudio histórico como la recreación visual de la fachada del monasterio, ambos elementos claves de cara a ahondar en el valor patrimonial del inmueble.
Durante la presentación, el arquitecto Mario Creciente aludió precisamente a la importancia del Monasterio de Santa Catalina, un Bien de Interés Cultural (BIC) de “primer nivel”, y del propio patrimonio como un elemento “con una vocación comunitaria” y un valor representativo consensuado socialmente.
A mayores, la historiadora María Luz Ríos ahondó en el recorrido histórico y los orígenes del monasterio y Dolores Fraga detalló la metodología de investigación llevada a cabo en el estudio histórico, que permitió construir hipótesis sobre el aspecto original de la antigua portada gótica.
Para alcanzar las conjeturas (empleadas después en la recreación visual de la fachada) tanto arquitectos como historiadoras consolidaron un proceso de trabajo transversal en base al diálogo, en el que se analizaron, por una parte, fragmentos físicos, resguardados en las instalaciones del Cabildo de Montefaro y en el Museo Arqueológico e Histórico del Castillo de San Antón, y, por otra parte, fotografías y planes arquitectónicos. Todo con el objetivo de conseguir una aproximación visual lo más contrastada posible, que toma forma a partir de las ilustraciones de Ricardo Pérez Martínez.
Mirando de cara al futuro, la concejala Alma Barrón destacó que el gobierno municipal está inmerso en la “búsqueda constante de un volumen de inversión económica mayor” que ayude a prolongar el “esfuerzo continuado del Concello para rehabilitar las infraestructuras del Monasterio de Santa Catalina”.
