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MANU AMOR
Corría el minuto 60 de partido ante el Coruxo cuando el bíceps femoral de Nano Macedo dijo basta. Una pequeña microrrotura alejará al zaguero del encuentro que, este sábado, disputará el Racing ante la Ponferradina en El Toralín.
A la espera de la llegada de otro central – y ya descartada la de Juan Rodríguez, que militará en el filial del Sporting- Jacobo Trigo asoma como sustituto del herculino. El centrocampista, al igual que la pasada campaña en el Pontevedra, se reconvertirá para ser la pareja de baile de Churre. Lejos de quejarse, lo asume con humildad. “Por circunstancias, tanto en el Zamora como en el Logroñés tuve que jugar atrás y me adapté perfectamente”, asevera.
El baionés asegura sentirse igual de cómodo que en la medular, a la vez que recuerda que está “para ayudar”. Habla también de lo importante que es “meterse arriba ya” y otorga especial importancia a las “buenas sensaciones”. Reconoce, eso sí, que hay “mucho que mejorar”.
Los laterales Aitor Pascual y Maceira completarán la defensa en la localidad berciana, y podrían incorporarse al once futbolistas como Juan Mera o Alain Eizmendi, de los últimos en llegar, circunstancia en la que Jacobo hace hincapié: “Hay muchos jugadores que llegaron tarde, que apenas han hecho pretemporada y eso es un lastre, pero estamos contentos por cómo está yendo todo”. Además, destaca la “libertad” que Miguel Ángel Tena otorga a los mediocentros “a la hora de atacar, cuando hay espacios”.
El equipo entrena este viernes, en sesión matinal. El sábado, a las 16:00 horas, la plantilla está citada en A Malata para partir hacia Ponferrada. “Hay que ir a por el partido. Todavía no conocemos mucho a los rivales y no sabemos cómo van a funcionar, así que tenemos que pensar en nosotros”, finaliza.
