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El patrullero de altura «Atalaya» ha colaborado con la Marina de Mauritania y se encuentra actualmente realizando maniobras con la Guardia Costera de Cabo Verde en la primera fase de su despliegue en África Occidental y Golfo de Guinea.
Según informó la Armada, con el propósito de realizar labores de vigilancia marítima combinada, personal de la Marina mauritana embarcó a bordo del «Atalaya» permitiendo a su tripulación adquirir un conocimiento más profundo de las actividades marítimas que se realizan en dichas aguas.
El patrullero permaneció durante las labores de vigilancia marítima enlazado con el Centro de Control de Operaciones Marítimas de Mauritania en Nouakkchott para la coordinación de las actividades realizadas.
Además, dentro también de esta primera fase del despliegue se está llevando a cabo un adiestramiento en apoyo a la Guardia Costera de Cabo Verde en Mindelo, tanto en el mar como en puerto.
En este caso, la colaboración está centrada en las áreas de seguridad interior, acción marítima, sanidad y maniobra. También se realizará, al igual que con la Marina de Mauritania, una patrulla de vigilancia marítima combinada.
Al igual que ocurrió con el patrullero «Centinela» en el segundo semestre del pasado año, el «Atalaya» apoyará el Plan de Diplomacia de la Defensa con la finalidad de cooperar con los países ribereños del Golfo de Guinea para el desarrollo de sus capacidades y con el objetivo de fomentar el conocimiento y confianza mutuos, contribuyendo a la seguridad marítima regional.
Esta iniciativa pretende incrementar la estabilidad y seguridad marítima en la zona del Golfo de Guinea, aumentando las capacidades operativas de las naciones de África Occidental mediante la realización de ejercicios de adiestramiento conjuntos.
Al mando del capitán de corbeta Jesús González-Cela Franco, el «Atalaya» es el cuarto buque de su serie y tiene su base en el Arsenal Militar de la ciudad de Ferrol. Sus principales misiones en la actualidad comprenden, entre otras, la vigilancia marítima de las costas españolas y de su zona económica exclusiva, el conocimiento del entorno marítimo y en colaboración con otros organismos públicos llevar a cabo el control del tráfico marítimo, la vigilancia de pesca, así como la búsqueda y rescate de náufragos entre otros.
