Galicia Ártabra Digital Noticias de Ferrol y la comarca de Ferrolterra.
El astillero de la Bahía tiene una dura competencia en Ferrol para conseguir este contrato
J. A. H. en el Diario de Cádiz comenta la dura competencia que se presenta a los astilleros de la Bahía con el de Navantia Ferrol tras conocerse la intención de la Armada Española de contar con su primer portaviones, dentro de su plan de modernización y ampliación de la flota, para lo que ha encargado a Navantia un informe sobre la viabilidad de «un proyecto que, evidentemente, no será barato ni rápido de construir», y que pone frente a frente a los astilleros públicos de Ferrol y Bahía de Cádiz, como los dos grandes referentes en la construcción naval en España.
Pendiente de que Navantia elabore el análisis que se le ha pedido y que la Armada, y con ello el Ministerio de Defensa, dé su visto bueno a la operación y a la inversión a realizar (en pleno proceso de incremento de los gastos militares aprobados por el Gobierno, para llegar al 2,1% del PIB), desde Galicia ya se está produciendo un movimiento social y empresarial para que este proyecto lo asuma el astillero de Ferrol, destacando la enorme carga de trabajo y de creación de empleo que puede suponer. En la Bahía de Cádiz, por el momento, el movimiento es nulo.
Todo hace suponer que la decisión final sobre el lugar de construcción del portaviones tendrá un marcado carácter político. No es la primera vez que la Bahía de Cádiz ha perdido contratos en favor de las instalaciones navales gallegas, que tiene un lobby más potente que el que pueda defender los intereses gaditanos.
Lo cierto es que la balanza de las dos factorías navales, a la hora de defender su candidatura, está muy nivelada.
Ferrol juega con la ventaja de haberse encargado en su momento de la construcción de varios de los grandes buques de la Armada española, como el Príncipe de Asturias y el buque anfibio Juan Carlos I, que hoy es el buque insignia de nuestra Marina, limitado en todo caso al uso de aviones de aterrizaje vertical. Igualmente ha construido un portaviones para Tailandia.
Puerto Real tiene una más que sustancial ventaja en el plano técnico, al contar con unas instalaciones más potentes que las que funcionan en el Ferrol. Al fin y al cabo en los años 70 se construyó en Puerto Real el mayor dique de toda Europa, en estrecha competencia con las factorías asiáticas. Un astillero preparado para la construcción de los grandes petroleros que, entonces, se suponían que iban a ser necesarios en el mercado internacional.
De esta forma, Puerto Real cuenta con un dique de 500 metros de longitud, 15 de fondo y 100 metros de mangas. Espacio suficiente para poder construir el futuro portaviones (que inicialmente tendrían capacidad para 30 aviones y 40.000 toneladas). Todo lo contrario que en el Ferrol, algo que se reconoce en Galicia donde apuestan por la experiencia acumulada por ellos en los últimos años.
La apuesta por la industria eólica marina
En este sentido en los últimos años, Puerto Real, y ese es un aspecto cada vez más criticado por los trabajadores, ha concentrado su actividad fundamentalmente en la industria eólica marina. Para ello, Navantia creó una línea de negocio bajo la denominación de Navantia Seanergies. No obstante, la importante carga de trabajo que ha ido acumulando la empresa pública en su última etapa con estos nuevos contratos aún le dejan hueco para asumir proyecto relacionados con la defensa.
En este sentido, junto al astilleros de San Fernando, se está trabajando en el nuevo MAB IS, a la vez que cerró un contrato con la Marina británica para, en colaboración con un astillero británico, construir tres destructores FSS.
Más allá de este portaviones, la Armada española ha planteado para los próximos 15 años un plan de modernización de media vida de las fragatas F-100, los buques de asalto anfibio tipo LPD y los cazaminas MCM. Además se plantea contar con 8 nuevos patrulleros costeros y dos nuevos BAM. Ya se anunció la construcción de dos buques hidrográficos costeros y un oceánico. También está anunciado un buque de aprovisionamiento logístico.
Pero, además de eso, entre las necesidades están un buque de investigación oceánica, un BAM AIG (buque de inteligencia), un petrolero de flota, seis corbetas EPC (las corbetas en las que Navantia está implicada dentro de un consorcio europeo), otras dos F-110 (aparte de las cinco ya encargadas y que se construyen en Ferrol), dos submarinos s-80 (correspondientes a una segunda fase, tras los cuatro primeros que se construyen en Cartagena); siete buques conectores, dos nuevos LHD (portaaeronaves), tres buques nodriza (LXX) y seis cazaminas MCM. Es decir, la operación de modernización y ampliación de la flota más importante de las realizadas por nuestra Armada.
